Recibe Gratis mi ebook “Encuentra tu Rumbo – 5 razones por las que te sientes perdido, sin saber qué hacer ni qué camino tomar en esta etapa de tu vida».

¿No sabes qué hacer con tu vida? Aquí está el secreto

Compartir en:
No sé qué hacer con mi vida ni hacia donde voy

No saber qué hacer con tu vida no es algo que deba avergonzarte. Y no importa la edad que tengas. Debo confesarte que yo también me sentí así hace algún tiempo. Fue un punto de inflexión en mi vida, donde tuve muchas dudas, miedos, e incertidumbre respecto a mi futuro.

Además, aunque no lo parezca, es algo cada vez más común dentro de nuestra sociedad. Generalmente les ocurre a estudiantes al momento de elegir una carrera o incluso al terminarla. Llegando a un punto donde se sienten perdidos y necesitan descubrir su camino tanto a nivel personal como profesional. Sin embargo, este ya no es un problema exclusivo de jóvenes.

Son cada vez más las personas que llegan a cierta edad «madura» y de pronto entran a una etapa en donde no saben qué hacer con su vida, no saben qué camino tomar o a qué dedicarse a partir de ahora.

Tal vez llegaste a tus 30’s, 40’s o 50’s, y estas en un punto en donde no sabes qué sigue a partir de ahora, o cuál es el siguiente paso que debes dar para rencontrarte y devolverle la ilusión y la inspiración a tu vida.

Créeme, la edad no tiene nada que ver cuando se trata de encontrarle un sentido, un propósito y un significado profundo a tu existencia.

Te puedes sentir extraño porque la mayoría de personas parecen saber exactamente qué hacer con su vida. Nadie se preocupa por esos temas y pareciera que es algo que no debería importar o preocuparte demasiado. No obstante, el hecho de que lo parezca, no significa que así sea.

Muchos han aprendido a vivir en piloto automático. Viven sin cuestionar sus acciones, sus creencias, ni su manera su de vivir. No tienen metas ni objetivos, ni piensan en lo que quieren hacer de su vida ahora, ni a largo plazo.

Por fortuna, no eres uno de ellos. Y es que, si estás leyendo estas palabras ahora mismo, significa que eres como pocos. Tienes una sensación de que necesitas algo más para volver sentirte vivo. Algo que te devuelva la ilusión, el entusiasmo y la motivación que posiblemente perdiste hacer algún tiempo atrás.

El no saber qué hacer con tu vida es algo bueno. Es el primer paso hacia grandes y positivos cambios que están por venir (créelo así a partir de ahora). Es como los inicios hacia un renacimiento personal y profesional, que te permitirá convertirte en la persona que debes y necesitas ser, dándole una nueva dirección y sentido a tu vida.

La razón principal por la cual no sabes qué hacer con tu vida

Te lo diré sin rodeos:

Vives cómodo y satisfecho, y por eso te sientes insatisfecho.

Sé que suena contradictorio, pero permíteme explicarte con más detalle…

La llegada de la revolución industrial, que ocurrió hace poco más de un siglo, trajo consigo un desarrollo acelerado de nuestra sociedad. Esto se tradujo en ventajas y oportunidades que nunca antes había experimentado la raza humana en toda su historia (por lo menos hasta donde sabemos).

Pasamos de tener una vida austera, tranquila y sencilla, a una vida más compleja, llena de abundancia, comodidades y demás beneficios. Se crearon procesos para la producción de “cosas” en grandes cantidades. Se generó una mayor infraestructura, vehículos para el transporte, generación acelerada de comida, investigación científica y tecnológica, se instalaron conductos de agua potable, electricidad, servicios de salud, «tienditas» en la esquina, y muchas cosas más que ya conoces.

En pocas palabras, se crearon servicios y productos que satisfacen necesidades, cumplen deseos o solucionan problemas de la gente. Todo esto se tradujo en una vida más cómoda para ti, para mí, y para la mayoría de personas que nos rodean. Las necesidades básicas comenzaron a estar cubiertas.

[Artículo recomendado: Crees que el mundo está cada vez peor ¿Necesitas leer esto?]

Nota importante: Soy consciente de que hay muchas zonas subdesarrolladas en el planeta donde, tristemente, hay millones de personas que aún no gozan de los benéficos que tienen algunos países «privilegiados». A pesar de ello, estoy optimista, y tengo la certeza de que, con el tiempo, mejoraremos y crearemos un sistema de crecimiento global que realmente economice, y no derroche y despilfarre, que sea benéfico para todos sin importar de que país o etnia provengas, y sea amigable con la naturaleza y el medio ambiente.

¿Y si tuvieras que vivir como hace 2 siglos?

Dime ¿Qué pasaría si en este momento te despojaran de todas tus bendiciones, ventajas y comodidades de la cuales dispones hoy y cada día?

¿Qué pasaría si te quitarán el internet, Facebook, YouTube, TikTok e Instagram, tu smartphone, los centros comerciales, los hospitales para pedir ayuda médica, los bares, el cine, las industrias y oficinas para pedir empleo?

Cuéntame ¿Qué harías si te quitaran el agua potable, la comida en el supermercado, las medicinas en la farmacia, la ropa en tiendas y plazas comerciales y cada una de esas comodidades y ventajas que trajo consigo la revolución industrial?

Piénsalo bien, tu dinero no tendría ningún valor y tendrías que recorrer largas distancias tan solo para tomar un poco de agua y transportarla a tu familia. Tendrías que cultivar tus alimentos, salir a cazar o criar animales, y producir algo de valor para hacer «el trueque».

Si te quitasen tus comodidades, pertenencias y momentos que tienes ahora, entonces sabrías que hacer con tu vida; tu trabajo sería sobrevivir. Esa sería la necesidad primordial que te obligarías a cubrir por sobre todas las cosas.

Y es que, cuando tu vida peligra; cuando tienes sed, hambre, o existe la posibilidad de ser devorado por un depredador (que también tiene hambre), no piensas en dejar un legado, en encontrar tu propósito, o en lo injusta que es la vida contigo.

Sin embargo, como ahora no estás en tal situación, entonces necesitas algo más para ser feliz, sentir plenitud y realización personal. Buscas en esta vida «ordinaria» llena de bendiciones y ventajas, un sentido y un propósito que te haga llegar más «lejos», y sentir que estás aprovechando tus días en el mundo.

Nuestra mente tiene prioridades, y mientras no te sientas en peligro, tengas alimentos y un refugio donde puedas cubrirte de la intemperie, entonces usarás tu mente para ir más allá. Cuestionarás tu propia existencia y buscaras un objetivo más grande que simplemente comer, subir fotos a redes sociales, reproducirte y morir.

Necesitarás «algo más» para sentir que tu vida tiene un propósito más amplio, y tratarás de darle un significado más profundo a lo que eres y lo que haces cada día.

Es increíble, pero lo que hace a muchas personas vivir en una zona cómoda, segura y conocida durante toda su vida, es lo mismo que hace muchas otras, buscarle un sentido mayor a todo lo que hacen, salir el confort y hacer con su vida algo inolvidable.

Tenemos un nivel de razonamiento mayor que las otras especies del planeta. Esto nos impulsa a pensar en grande, tomar consciencia de nosotros mismos y considerar el futuro y sus posibilidades. Es ahí donde se encuentra la raíz de tu insatisfacción actual.

Tienes una necesidad imperiosa por saber qué hacer con tu vida y trascender en ella. Algo que tenga sentido y te haga levantarte de la cama cada día, motivado y entusiasmado por el día que te espera.

¡Eres diferente! Eres parte de una minoría que se cuestiona lo establecido, que no se conforma con las circunstancias actuales, y desea sacar el máximo partido a su vida.

A partir de ahora, te animo a dejar que las cosas las cosas fluyan en su cauce natural. Visualizar tus posibilidades y comenzar por un camino alineado contigo. Lleno de pasión, vocación, verdadero propósito y significado.

Si estás de acuerdo y tienes un deseo genuino para lograrlo, entonces continuamos… 😉

Algún día tuviste las cosas claras

No siempre estuviste sin rumbo, alguna vez tuviste claridad y certeza.

Cuando eras pequeño sólo pensabas en jugar y divertirte. El futuro parecía lejano y no había razón para preocuparte. Tan solo vivías el presente y lo disfrutabas de manera natural. El mundo era un lugar nuevo que explorar, en donde cada día era distinto al anterior y aprendías algo diferente.

No obstante, conforme fuiste creciendo, te fuiste sumergiendo en la monotonita. Te adentraste en «la piel del conejo» y dejaste de impresionarte por las cosas «simples» de la vida. Fuiste adoptando gustos por ciertas actividades placenteras y comenzaste a buscar más de eso. Tal vez fueron los videojuegos, la natación, el baile, la lectura, la televisión, o simplemente los juegos con tus compañeros y amigos del colegio en el recreo…

Podías pasar horas enteras disfrutando el momento presente, No existían horarios y tu único enfoque era vivir lo que te trajera la casualidad o la suerte.

En aquel tiempo, no te preocupabas por lo que sería de tu futuro, simplemente disfrutabas de la vida y tu única obligación («impuesta» por tus padres) era estudiar e ir a la escuela.

«Ya llegará el momento donde tenga que trabajar» tal vez te dijiste a ti mismo en algún momento cuando fuiste pequeño. Después de todo, ese era el camino correcto ¿No es así? Aquel que nos enseñan desde niños, y que hay que seguir ciegamente sin cuestionarlo. Sin darte cuenta, te dijeron qué hacer, cómo hacerlo y cuando hacerlo ¿Qué podía estar mal? Después de todo, todos los niños que conocías hacían lo mismo.

El problema llego, cuando elegir tu camino ahora estaba completamente en tus manos. Y saber qué hacer con tu vida ahora dependía completa y exclusivamente de ti. No había un camino establecido ni una regla impuesta por lo adultos que te diera un indicio de qué seguía a partir ahora.

Elegiste sin dirección ni buenas bases

Tal vez elegiste una carrera y no fue lo que esperabas. Así tu inconformidad persistió, hasta que decidiste buscar respuestas a grandes preguntas existenciales como las siguientes:

«¿Por qué estoy aquí? ¿Para qué vivimos? ¿Qué quiero hacer con mi vida? ¿Hacia dónde me dirijo? ¿Qué me gusta hacer? ¿Qué me mueve? ¿Cuál es el camino correcto?«

Esto lo sé porque yo mismo pase por tal situación. Y debes saber que es algo que le sigue ocurriendo a muchas personas cuando llegan a cierta etapa en su vida donde necesitan descubrir qué hacer con su vida y tomar una nueva dirección.

Tal vez te diste cuenta que la carrera universitaria no fue como te la «pintaron», posiblemente tuviste un hijo que cambio tus prioridades, o te separaste de tu pareja y ahora no sabes qué hacer o qué rumbo tomar. Tal vez lo tuyo sea que ya no te gusta tu trabajo y quieres algo diferente. Probablemente quieras encontrar un nuevo empleo o crear tu propio negocio, sin embargo, primero quieres encontrar algo que te apasione de verdad y tener la certeza de que es la opción adecuada.

Sea cual sea la razón, la necesitad es la misma: Tienes un deseo por saber…

¿Qué hago con mi vida?

En mi caso, terminé mi licenciatura con mención honorifica (se me daban bien los estudios). Después, elegí hacer una maestría porque se me presentó la oportunidad a través de una beca. Sin embargo, desde aquel momento tenía la idea de emprender mi propio proyecto. Quería hacer algo que realmente me importará, me impulsará y me motivará, y no simplemente ir a trabajar para ganar dinero.

Quisiera decirte que lo descubrí, me atreví y a partir de ahí todo fue color de rosa, pero no fue así. El camino no suele ser recto. En vez de eso tome otros caminos. Emprender no lo veía posible. Tenía dudas y la falsa creencia de que, para tener un negocio, antes debía ahorrar mucho para poder invertir, tener éxito y dedicarme a ello… En realidad, solo era mi miedo y falta de conocimientos disfrazado en forma de excusas.

Al terminar la maestría, trabajé en la industria un par de años. No obstante, al poco tiempo (y créeme que fue muy poco) me di cuenta que eso no era para mí. No me gustaba estar encerrado en una oficina, trabajando solo para cumplir con un horario. Haciendo tareas que no me importaban, solo por la esperanza de un salario al final de mes. Para mí eso no tenía sentido. Sabía que estaba desperdiciando los mejores años de mi vida. Años que sabía no volverían jamás y, por lo tanto, necesitaba hacer algo al respecto.

¿Qué hice entonces? Regrese a la universidad a continuar con un doctorado. Me postulé como becario, hice el examen de ingreso y fui aprobado. Durante el proceso, tuve la oportunidad de dar clases a jóvenes universitarios. Este fue un punto de inflexión que marco completamente mi vida, mi rumbo y me permitió estar escribiéndote estas palabras ahora mismo.

Durante ese tiempo, además de buscar formas de emprender, descubrí que muchos de mis alumnos no sabían hacia dónde se dirigían. No tenían idea de qué hacer con su vida. Simplemente llegaban, se sentaban y esperaban a yo les dijera qué hacer, qué creer y qué pensar ¿Puedes creerlo?

Tomar el rol de alumno y profesor, me abrió los ojos. Me di cuenta de las carencias de la educación tradicional, y de lo importante que es saber qué hacer y hacia dónde dirigir nuestra vida y nuestros esfuerzos en cada etapa. En ese tiempo comenzaba a nacer este maravilloso proyecto.

Lo que quiero decirte con esta historia es que, cuando eres niño, no piensas en lo que harás con tu vida, simplemente vives. Pero tarde o temprano llega un momento donde necesitas pensar qué quieres para tu futuro y elegir qué hacer o qué dedicarte. Literalmente tu destino ahora está a tu cargo. Ya no hay un camino previamente marcado por la sociedad, no hay pasos o grados que seguir, ni alguien que te diga lo que sigue a partir de ahora.

A partir de ese momento eres libre de elegir qué dirección tomar y cómo utilizar tus gloriosos días de vida; los más importantes de tu existencia.

Desafortunadamente, en ese momento la mayoría no somos conscientes de la valiosa oportunidad y el enorme tesoro que tenemos en nuestras manos.

Una elección que marca tu vida

Y es que, me gustaría que te dieras cuenta ahora mismo, que tus opciones son inmensas, y lo que decidas o no hacer con tu vida solo te concierne a ti. Si decides desperdiciarla en cualquier empleo, negocio o actividad poco estimulante o motivante, entonces ese será tu asunto. A nadie le importará lo que hagas de tu vida tanto como a ti. Y por eso, necesitas darle la prioridad realmente que merece.

A muchos de nosotros nunca nos enseñaron a tomar decisiones. Cuando eres pequeño sabes lo que tienes que hacer: estudiar. Pero eso no es decidir, solo es seguir una serie de pasos definidos con antelación. Eso no te ayuda a aprender a tomar decisiones importantes que definen tu futuro ni te ayudan a lograr tus objetivos. Es más, ni siquiera tienes objetivos.

Pasas muchos años en la escuela hasta que llegas a una etapa donde te dejan que tomes la primera gran decisión de tu vida: Elegir a que dedicarte, qué carrera estudiar y qué camino tomar.

¿Pero cómo es posible? Nunca te dejaron tomar decisiones importantes. ¿Cómo pueden pretenden que sepas elegir qué hacer con tu vida si desde un principio solo te enseñaron a seguir «ciegamente» un camino preestablecido sin la oportunidad de cuestionarlo?

La sociedad tenía definido lo que harías con tu vida durante tus primeros 15 o 20 años de vida, incluso desde antes de que nacieras. No recibiste las herramientas ni unas bases sólidas para tomar decisiones de tal índole, y nunca estuviste expuesto al mundo real ni podías saber qué esperar de él. Dime ¿Cómo esperar que seas un adulto que sepa qué hacer de su vida si no tienes idea de cómo es esa la vida fuera de la escuela?

Estoy de acuerdo en que la vida es para experimentar y equivocarse. No obstante, con la debida instrucción y una buena dirección, cualquier persona desde los 20’s (incluso antes), podría hacer grandes hazañas con un propósito claro, sólido y definido, con confianza y convicción.

Podrías comenzar a crear tu vida bajo tus propios términos y con ello un mundo mejor. No llegarías a los 30, 40 o 50 con problemas existenciales, tendrías tus objetivos bien definidos y sabrías cambiar de dirección conforme tu vida evoluciona.

13 pasos vitales para saber qué hacer con tu vida a partir de ahora

Y bueno… el problema ya está. Ahora sabes por qué no tienes claro lo qué quieres, ni hacia dónde te diriges. Ha llegado el momento de las soluciones. 🙂

Si estás leyendo este artículo y llegaste hasta aquí, entonces te felicito. Te estás tomando en serio tu futuro y eso me gusta. Lo más probable es que te sientas identificado de alguna forma con lo que te he contado hasta ahora.

Seguiste el camino prestablecido que ni siquiera te permitieron cuestionar ni analizar. Cuando fue momento de tomar las riendas de tu vida, no supiste qué hacer ni hacia dónde ir, y así has pasado los años; tal vez incluso décadas; siendo arrastrado por la «ola», el viento que pega más fuerte.

Es posible que estés llegando los 30, 40, 50, o incluso más. No importa la edad que tengas. Como te lo dije en un inicio, para darle sentido a nuestra vida no existe un momento especifico o una edad concreta.

Es por eso que a continuación voy darte algunos consejos que te ayudarán a tomar una mejor decisión en este momento, con respecto a tu futuro personal y profesional.

Antes que nada, debo advertirte que ningún consejo sirve de nada si no pones manos a la obra y no pones de tu parte. Si realmente quieres hacer un cambio y tener claridad respecto a tu futuro, vas a tener que tener que apelar a un deseo genuino, estar dispuesto a moverte y tomar riesgos. De otro modo, este artículo pasará a ser uno más que lees por internet y no servirá de nada.

Recuerda:

Si «algo» quieres, «algo» te cuesta.

Dicho esto, y si estás de acuerdo, entonces vamos a ello…

1. Deja de ser un barco a la deriva

El tiempo vuela, y si no sabes a donde ir, entonces puedes pasar tus días haciendo algo que no te gusta ni te importa. Desperdiciando tu talento y siendo infeliz solo por una recompensa económica a final de mes.

Si te sientes estancado, perdido o desmotivado, entonces deja de avanzar. Detente y analiza un momento tu situación. Piensa en lo que no te gusta y lo que no quieres, pero también en lo que si quieres. Encuentra el detonante de tu insatisfacción.

Si no lo haces, serás como un barco a la deriva sin rumbo fijo. Podrías pasar décadas, o una vida entera viviendo inconforme e insatisfecho, pensando que pudiste hacer algo diferente con tu vida, pero nunca te atreviste ni le diste la atención necesaria.

Evita llegar a tu vejez llena de arrepentimientos, ya que es lo peor que te puede ocurrir si continuas así.

Debes realizar una introspección personal y tomarte el tiempo que sea necesario sin ninguna prisa.

Piensa en ti; en lo que quieres ser, lo que te gustaría dar y lo que quisieras recibir. En ese orden de importancia.

2. Conócete a profundidad

No vas a descubrir qué hacer con tu vida mirando solo afuera, debes primero buscar dentro de ti. Necesitas recabar información sobre quién eres, qué necesitas, qué deseas, qué te identifica, qué te hace diferente, etc.

El mundo tiene infinitas posibilidades que ofrecerte, y para elegir bien debes conocerte en profundidad, explorar y después considerar tus opciones.

Tal vez te suene algo sencillo y básico pero la realidad es que la mayoría de personas no se conocen. No saben qué les apasiona, qué les interesa o qué disfrutan. No conocen sus valores, sus creencias o sus convicciones. No saben absolutamente nada de ellos mismos.

Tal vez sabes cuál es tu color preferido, el platillo que más te gusta, o tu música favorita, pero esa solo es la parte superficial de tu ser. Para saber qué hacer con tu vida debes ir más profundo.

Por ejemplo, puedes comenzar por:

  • Descubrir tus fortalezas, habilidades, intereses, necesidades personales y en algunos casos, tus pasiones.
  • Encontrar un propósito de vida, No es lo mismo lo que puedes hacer, que lo que quieres y necesitas hacer. Define algo que quieras conseguir que te haría sentir tremendamente orgullosa(o). Una propuesta para para tu vida; saber qué quieres.
  • Descubre tus valores. Define aquello que más te importa y valoras por encima de cualquier cosa y considéralo dentro de tus opciones de futuro. Esto es vital.
  • Define un futuro emocionante. Encuentra tus necesidades personales y deseos motivantes que quieres satisfacer a corto, mediano y largo plazo.

Con estos 4 puntos tendrás un buen comienzo.

🔹 Descarga el e-book 📗 «Encuentra tu rumbo» y descubre 5 razones por las que te sientes perdido, sin saber qué hacer y qué camino tomar en esta etapa de tu vida.

3. No busques solo qué hacer con tu vida; muévete

Puede sonar contradictorio, pero no es así. Saber qué hacer con tu vida, contiene la palabra clave “hacer”. Esto quiere decir que no vas a descubrir qué hacer con tu vida solo pensando.

No puedes saber si quieres, deseas y necesitas ser biólogo marino, instructora de ballet profesional, Youtuber, o profesor de artes plásticas si solo lo piensas y lo imaginas. No será suficiente. Se requiere tomar acción, dejar a un lado la apatía o la flojera, espabilarte y afrontar tus miedos.

Esto nos lleva al siguiente punto.

4. Atrévete, experimenta y explora

Puedes conocer tus gustos, intereses y pasiones. Sin embargo, aún no los conoces todos. Hay actividades que te podrían interesar, pero que aún no descubres o no has probado. De igual forma, hay actividades que crees que te gustarían, pero que has idealizado y posiblemente no sean lo que esperas cuando las pruebes por ti mismo.

Para saber qué hacer con tu vida, debes experimentar y explorar diferentes caminos; crea hipótesis y valídalas. No hay forma de que sepas que algo es para ti si no lo has probado antes o si no sabes que existe.

Comienza probando las actividades que conoces, disfrutas y te aportan beneficios a ti y a otros. Toma el papel de experto.

Por ejemplo, imagina que te gustaría ser baterista profesional y lo pruebas por algunas semanas. Practicas diariamente en un horario definido y te aburres seis meses después… ¿Fue un error o es un fracaso? No, claro que no. Validaste tu hipótesis, ahora sabes que formar parte de una famosa banda de rock internacional como baterista y músico, en realidad no encaja contigo; no es parte de tus intereses ni de tus valores. Ahora puedes pasar a lo siguiente.

Date cuenta que desear algo, varía mucho antes y después de probarlo, por eso es tan importante la validación.

De igual forma debes tener presente siempre que si algo quieres, algo te cuesta. No confundas la falta de pasión con la flojera o la apatía. Cualquier cosa que valga la pena no será fácil.

5. Define un objetivo claro y congruente contigo mismo

Muchas personas se equivocan al definir sus objetivos de vida. Centran sus decisiones entorno al dinero, al confort y mantener las apariencias ante sus conocidos.

Es común ver a muchos jóvenes estudiando una carrera, solo porque al terminarla creen que van a ganar mucho dinero, o van tener muchos días de vacaciones, pero eso no funciona a largo plazo. Si eliges una actividad o profesión, basándote solo en dichos factores lo único que ocurrirá es que te convertirás en un esclavo moderno.

Si quieres vivir una vida feliz, abundante y satisfactoria, entonces debes olvidarte (por ahora) del dinero, de lo que piense la gente y de tus deseos de comodidad. Recuerda que ser feliz no es lo mismo que estar cómodo.

Tus objetivos y tu enfoque deben centrarse en: Aportar valor al mundo, convertirte en la persona que quieres ser, dar buenos momentos a tus seres queridos y disfrutar de cada instante; debes disfrutar el proceso de dirigirte hacia tus más grandes sueños. De esta forma podrás traer verdadera abundancia a tu vida.

No hay manera de que recibas lo que quieres viviendo de forma pasiva. Debes fijar un objetivo con fecha de caducidad para concretarlo, aplicar ingeniería inversa y comenzar a actuar con lo más básico y simple sin pensarlo demasiado. Recuerda que mucho análisis genera parálisis.

6. Piensa en la gente que admiras y observa a los líderes del sector

Si dentro de tus opciones se encuentra, por ejemplo, convertirte en:

  • Artista (músico, cantante, pintor etc.).
  • Empresario/Emprendedor.
  • Médico cirujano.
  • Fotógrafo o Filmaker profesional.
  • Profesor de colegio.
  • Arquitecto.
  • Podcaster/Youtuber/TikToker.
  • Abogado.
  • Diseñador gráfico.
  • O cualquier otra profesión, negocio u oficio.

Entonces observa a los referentes, expertos y a las personas que admiras en tales áreas. Busca a buenos profesionistas que ya hayan conseguido aquello a lo que te gustaría aspirar.

Si te es posible, entrevístalos; plática con ellos. Invítalos a cenar o comer y pregúntales cómo es su vida personal y laboral.  Pregúntales por qué se dedican a eso, por qué eligieron esa actividad o carrera, qué les gusta y qué nos les gusta de su trabajo…

Si tienes la oportunidad, también pregunta cómo llegaron a la posición donde se encuentran ahora y pídeles consejo.  Estoy seguro que será una plática de mucho valor que te permitirá ampliar tu perspectiva y tomar decisiones más acertadas e informadas.

Cuando tengas sus respuestas, no olvides preguntarte a ti misma(o): «¿Eso es lo que quiero para mi vida? ¿En eso quiero consagrar mis mejores años y mi único y más valioso tiempo en el mundo?»

Podría ser que sigas a líderes inadecuados, Ten cuidado y evítalo a toda costa.

7. No viniste al mundo solo a ser feliz

Si quieres crear una vida con sentido, entonces busca dejar un legado; algo que vaya más allá de satisfacerte a ti mismo.

No le darás a tu vida un propósito solo consumiendo, siendo espectador y viviendo solo para ti. No es algo profundo y valioso que llene tu vida con significado. La vida no se trata solo recibir, se trata de dar para recibir en un ciclo positivo de valor y contribución mutua.

Piensa de qué manera te gustaría aportar al mundo, hacer la diferencia, y cómo te gustaría ser recordado.

No viniste al mundo solo a ser feliz, también a dar felicidad a otros.

8. Eleva tus sueños y tus criterios

Pensar solo en ti es pensar en pequeño. Al definir el futuro que deseas, debes pensar más allá de ti mismo y elevar tus expectativas personales.

Cubrir tus deseos es una tarea relativamente sencilla (aunque en este momento tal vez no te parezca así), y cuando esto suceda, cuando tengas tus necesidades cubiertas, volverás a encontrarte en la situación de no saber qué hacer con tu vida.

Es por eso que debes fijar tus sueños en algo grande que tú mismo. Tal vez debes involucrar a tu familia, a tus hijos, a tu comunidad, a tus amigos o al medio ambiente.

Define un propósito de vida y unos motivos, que te haga ir más lejos que solo conseguir dinero, fama, prestigio o alguna cosa material que ofrece el centro comercial. De hecho, las satisfacciones más grandes; aquellas que llenarán tu vida de verdadera realización personal y significado, son aquellas que benefician a otras personas y no solo a ti mismo.

Procura que el dinero no sea un fin, sino un resultado por el enorme valor que estás aportando al mundo a través de tus acciones y tu trabajo, ya sean productos, servicios o ambos.

9. Redefine tu concepto de vivir

Con todo lo que te he dicho hasta ahora, es momento de redefinir tu manera de ver la vida.

Para mí, vivir significa: posibilidades, movimiento, alegría, entusiasmo, aventura, arriesgarse, cultivarse, mente abierta, afrontar nuestros miedos, vivir el ahora, adoptar buenos hábitos, crear buenos momentos…

Dime ¿Para ti que significa vivir? ¿Cuáles son los sinónimos que le das a la palabra «vida»?

Cuando lo sepas, elige o busca una opción de futuro que contemple la mayor parte de eso y prueba.

Toma en cuenta que gran parte de tus acciones estarán definidas por la manera en que eliges interpretar tu vida y el significado que eliges darle.

10. Necesitarás hacer sacrificios

Al tomar un nuevo rumbo, lo más probable es que lo que vivas al inicio no se parezca nada a lo que imaginaste. Es normal, estarás en un proceso de cambio. Sin embargo, debes asegurarte de que las acciones que hagas día con día te acerquen a la vida que deseas y necesitas.

Y por favor nota que he dicho «vida que deseas y necesitas» y no solo «vida que deseas«. A veces nos enfocamos tanto en lo que creemos que queremos, que nos olvidamos de lo que realmente necesitamos para estar bien, sentirnos en equilibrio y ser felices.

Si tu sueño es tener una vida con libertad, es probable que te tengas que sacrificar algunos años de trabajo intenso para obtenerla. Aquí lo importante es que te encamines hacia allá, sabiendo en todo momento hacia donde te diriges.

Hay personas que sueñan con ser libres, pero no están dispuestos a hacer lo necesario (de acuerdo a su situación y circunstancias) para conseguirlo. ¡Que eso no te ocurrirá a ti!

Si das pequeños pasos de forma consistente y disciplinada, teniendo siempre claro hacia dónde vas, al poco comenzaras a ver tus primeros resultados y tendrás la sensación de estar construyendo tu vida a voluntad y bajo tus propios términos.

11. Prepárate antes de dar el salto

Dependiendo tu edad y tus responsabilidades, puede ser más o menos complicado darle a tu vida una nueva dirección. Por eso antes de dar el salto, primero debes trazar un plan.

Por ejemplo, si quieres dejar tu trabajo para emprender, o para buscar algo mejor, pero tienes deudas, tal vez lo primero que debes hacer es saldarlas. Esto te quitará mucha presión en el futuro. Te dará más tranquilidad y podrás tomar mejores decisiones.

Estar preparado no significa que debas esperar a que todo se alinee para comenzar. ¡Debes empezar ya! porque nunca habrá momento perfecto donde se den las condiciones ideales para actuar.

[Artículo recomendado: Tomar acción: La claves para transformar tu vida]

Muchos pensamientos negativos podrían rondar tu mente y llenarla de suposiciones falsas, pero no debes aplazar tus planes.

Tu mente te puede mostrar más obstáculos que oportunidades cuando miras la situación desde un enfoque pesimista.

Maurino M- Loyola

12. Sigue tu intuición más que la razón

Puede llegar un momento donde tengas varias opciones y no sepas cuál elegir. Tal vez haya una opción que crees que te dejará mucho dinero y te sientes tentado a elegirla por encima de aquellas que te apasionan o te interesan más. Cuando estés en un momento así, mi consejo es que elijas con el corazón.

Trata de elegir la opción que te cause miedo y a la vez excitación, emoción y entusiasmo. Sigue tu intuición y permite que tu interior sea la brújula que te guíe en los momentos clave de tu vida.

[Artículo recomendado: Escucha tu corazón y sigue tu intuición que no vas a equivocarte]

13. Cuidado con los pesimistas

Encontrarás gente pesimista que te intentara cortar las alas. Te dirán cosas como: “De que vas a vivir si te dedicas a eso”, “Ya hay mucha competencia”, “Ya estas viejo para eso”, “Deja de soñar y trabaja en algo que te deje dinero”, “Estas loco, eso no es posible”, “No lo vas a lograr”.

Estos comentarios incluso pueden venir de gente que amas y te ama. Claro que no quieren hacerte daño, su intención es protegerte y alejarte de la incertidumbre.

Sin embargo, debes tener cuenta 2 cosas:

  • Muchos de estos comentarios surgen a partir de sus creencias arraigadas. Algunas de ellas no son ciertas o no funcionan.
  • Hay cosas que pueden ser imposibles de lograr, pero la distancia entre lo verdaderamente imposible y lo que crees no posible, es muy larga. No puedes saber que algo es imposible para ti, si no lo intentas.

Una aventura te espera

Nuestra vida puede ser muy corta para no aprovecharla. Por favor, dedica tiempo y enfoque para descubrir qué hacer con ella.

Si luchas por conseguir tus sueños, a lo mejor no consigues exactamente lo que buscas, pero te aseguro que en el trayecto descubrirás grandes momentos y experiencias enriquecedoras que jamás olvidarás.

Elige una vida consciente y congruente con tus valores y convicciones personales. Crea tu propio destino y no temas equivocarte. Recuerda que no hay un solo camino correcto si no una infinidad de posibilidades, muchas de ellas con potencial para deleitarte.

Ninguna persona que haya alcanzado su éxito personal o hecho algo memorable, lo ha logrado sin cometer errores.

Y por favor nota que de la frase anterior he dicho «su éxito». Esto quiere decir que no hay un éxito absoluto. Cada uno tienes el deber de encontrar lo que quiere en la vida y descubrir la cima que quiera conquistar.

Tampoco tengas miedo a arriesgarte, para eso naciste, para experimentar, contribuir y disfrutar.

Busca una ocupación, proyecto, profesión u oficio que te aporte felicidad, trascendencia y la sensación de ser útil al mundo. Conviértete en la persona que quieres, debes y necesitas ser. 

Y si solo tienes una vida, entonces haz con ella la mejor vida que puedas. Que esa sea tu principal tarea y tu máxima prioridad desde ahora y para siempre. 🙂

◊♦◊

Ahora cuéntame: ¿Hace cuánto tiempo que estás sin saber qué hacer con tu vida? ¿Cuál es tu situación? ¿Cómo te sientes? ¿Qué has pensado al respecto?

Nos leemos en los comentarios. Y si te ha gustado, te invito a compartirlo con tus amigos o con alguien que lo necesite. Al hacerlo, me ayudas y me impulsas a seguir entregándote más contenido como este y te estaré muy agradecido. 😉

Compartir en:

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

54 comentarios

  1. ¡Me identifiqué tanto con este articulo! Actualmente estoy trabajando en algo que realmente no me molesta ni me motiva hacer, basicamente me da igual, pero detesto que entre el trayecto y trabajo, ambos consumen todo mi tiempo. Salgo a 6am de mi casa y llego a las 9pm, de ahi solo tengo 3 horas para hacer mis cosas, convivir con mi pareja, descansar, distraerme y preparar todo para el siguiente dia. Llevo un mes así y ya siento que no puedo con este bucle, la monotonia y ser absorbida por mi trabajo está consumiendome; siento que poco a poco me pierdo, hago las cosas en piloto automático, mis ganas de hacer mi mejor esfuerzo se perdieron, e incluso mi personalidad se ha vuelto plana y depresiva.

    Acabo de terminar una carrera, que la verdad, no me gustó por más que quise cambiarle el enfoque. Salí como una de las mejores en mi generación y a pesar de ello, no se sintió como un logro. Ahora, ya ejerciendo mi carrera todo ha ido peor. Si se escucha que me quejo mucho y sé que no esta bien que lo haga, pero la misma frustración me consume.

    Siento que esta falta de motivación viene de que estoy en una situación cómoda, no tengo deudas, tengo donde vivir, mis necesidades básicas cubiertas, apoyo de los que me rodean y además que durante la escuela (y ahora el trabajo) he sido buena y no me ha costado trabajo desempeñar las actividades. No me malinterpreten, no vengo de una vida de privilegios, al contrario, ha habido mucho sacrificio para llegar a este punto de mi vida y es presisamente por eso, que me siento vacia, probablemente porque después de batallar tanto, ahora mi objetivo principal ya no es intentar sobrevivir.

    Si sé que me apasiona, y he buscado muchas formas de comenzar con mi emprendimiento. Sin embargo, que mi trabajo actual me consuma todo mi tiempo, y en mi dia de descanso me tenga que enfocar en hacer labores del hogar que me llevan todo el día, eso impide que me dedique al verdadero proyecto que quiero hacer.
    Estoy en una encrucijada, odio mi trabajo, no hay ninguna situación que me impida dejarlo, sé lo que quiero, sé qué me apasiona pero no puedo moverme. Pienso: «Necesito dinero para emprender, necesito ahorros, y esta mal visto dejar un trabajo con solo un mes de haber entrado. Que dirán mi familia de ello, después de tantos sacrificios que hicieron para darme estudios y que al final eso no sirva de nada, solo porque me equivoqué al escojer carrera»

    (Escribiendo esto, me he dado cuenta que mi verdadera atadura, no es el trabajo, es el qué dirán).

  2. Hola Maurino, tengo 22 años y vivo actualmente en Bogotá, aunque soy de Venezuela (Estado Zulia), tuve una juventud súper limitada y casi siempre de independencia debido a la situación de mi país natal. Emigre con 17 años, aun así, a esa altura ya cursaba la mitad de mi carrera universitaria, me tocó congelar mis estudios y irme del país apostando por una mejor calidad de vida. Pasaron los años y siento que solo he perdido mi tiempo, que quizá no haya sido del todo mi culpa pero que estoy en el momento exacto para moverme hacia el camino correcto. Me siento perdido, siento que todo ha sido en vano, pero siento que es ahora o nunca. Mi familia está allá, hace mucho no los puedo ayudar económicamente porque tengo muchas deudas. Leí tu artículo y me identifique muchísimo, la diferencia es que yo no sé qué a qué dedicarme aún, soy bueno para la música, pero nunca me dedique a ella, de hecho, mi hermano es licenciado en música y es profesor en una academia de música, pero a mí nunca me ha parecido algo a lo que me deba dedicar. Me gusta el deporte, pero siento lo mismo, amo ver fútbol y practicarlo, cualquier deporte, pero no creo tener lo suficiente como para marcar la diferencia con ese ámbito. Así mismo amo andar en moto, pero debido a la difícil situación económica con la que lidio hace años ya ni siquiera la disfruto y peor aún, he tenido varios accidentes de tránsito debido a que siempre estoy trabajando y mi mente me obliga a siempre ir rápido porque de mi depende cuánto dinero produzca día a día. Enero 2023 ha sido el detonante, una ciudad sumamente difícil y compartiendo el mismo guayabo (resaca) económico de diciembre me han hecho ver que no estoy en donde quiero estar. Llevo días solo sentándome en parques, así como justo ahora, a pensar en que debería hacer. No sé si me respondas esto, pero tu artículo es lo mejor que he leído en años, daré el máximo por retener mucha de esta información y poder leer esto nuevamente con gran agradecimiento y satisfacción. Un gran saludo amigo.

    1. Hola Angelo.

      Primero que nada, decirte que, si sientes en tu interior que este es el momento exacto para elegir un nuevo camino, entonces debes hacerlo. De otra forma, con el tiempo esa idea se convertirá en una «espina» clavada en tu ser, que no te dejará tranquilo. Debes hacer caso a esa voz interior ahora y no dejarlo para más adelante. [Artículo recomendado: Escucha a tu corazón y sigue tu intuición que no vas a equivocarte]

      Una buena noticia es que, a tu edad, tienes mucho tiempo para definir aquello que te importa y te inspira, probar varias actividades y seguir tus intereses. El camino aún es largo. Pero no te confíes y avanza.

      Mi primer consejo es que no te rindas ni te conformes. Confía más en ti. ¿A qué te refieres cuando dices «no creo tener lo suficiente»? Si te gusta la música, ¿Qué es lo que te impide considerar dedicarte a ella? ¿Es la falta de confianza? ¿Lo ves complicado o imposible? Piensa que no tienes que ser un músico profesional para trabajar en esa industria. Podrías buscar oportunidades en la producción musical, la gestión de eventos o incluso la enseñanza. Si te gusta el deporte, ¿por qué no buscar trabajo en un equipo local o una academia deportiva? Piensa que, si hay personas que se dedican a eso de manera profesional es porque hay demanda y se puede vivir de ello. Si no fuera así, no habría entrenadores físicos o profesionales del deporte.

      Muchas de las decisiones que tomamos en la vida dependen de lo que creemos sobre nosotros y sobre el mundo. Si tus creencias no funcionan o no te ayudan, entonces debes cuestionarlas y adoptar unas mejores.

      En cuanto a tu situación económica, te sugiero que hagas un presupuesto detallado para ver en qué puedes recortar gastos y cómo puedes reducir tus deudas. Debes saldarlas para tener un poco más de tranquilidad y claridad al tomar decisiones.

      Comentas que: «no estás en dónde quieres estar», y hay algo valioso ahí: Sabes dónde quieres estar, y eso es muy importante. Es el primer paso para comenzar a avanzar; es como tener el «norte» que dirige tu brújula. Sin ese «norte» no hay dirección ni sentido.

      Lo que estás viviendo en este momento tal vez no te gusta o no es lo que esperas de la vida, pero debes mantener la perspectiva a mediano y largo plazo y no dejarte llevarte por las emociones del momento. Los cambios duraderos; aquellos sustentados por unas bases sólidas, no ocurren de la noche a la mañana. Requieren de un proceso de transición que puedes durar años. Por lo tanto, necesitas hacer de la paciencia tu mejor aliado.

      Me gustaría ofrecerte una video llamada sin costo para conocer mejor tu situación y darte algunos consejos más concretos. Por favor, házmelo saber si te gustaría, para ponernos de acuerdo.

      ¡Un abrazo!

      PD. No olvides descargar mi ebook. Seguramente sacarás algo bueno para este momento que estás atravesando. 🙂

  3. Hola Maurino. Tengo 35 años soy ingeniero. Pero me he mudado varías veces de país, aunque ahorita me siento bien donde estoy, hay veces que no sé qué camino elegir. Quiero hacer muchas cosas a la vez y no termino haciendo nada. Siento mucha confusión y que estoy perdida en sólo trabajar y trabajar, pero no en algo que me guste realmente.

    1. ¡Hola Alessa! Gracias por compartir tu experiencia y dejarnos tu comentario.

      Entiendo cómo te sientes. En algún momento todos, o la mayoría de personas, nos encontramos en momentos como esos: de confusión, indecisión y de no saber qué camino tomar.

      Primero, déjame decirte que es normal querer hacer muchas cosas a la vez, y más si eres una chica inquieta, creativa e imaginativa. Pero es importante que aprendas a priorizar y enfocarte en una cosa a la vez para poder avanzar y lograr algo de valor.

      Con frecuencia, cuando nos preguntamos qué hacer con nuestra vida, nos enfocamos en pensar en lo que nos gusta o apasiona, lo cual puede ser útil para algunos, pero suele estar incompleto. La dirección que toma nuestra vida está estrechamente relacionada con nuestra capacidad para entregar valor a la sociedad. Ya sea a través de servicios o productos que ayuden a mejorar la vida de las personas, es necesario contribuir de alguna forma para ser recompensado por el gran valor que logras aportar.

      Por otro lado, la dirección que toma nuestra vida está íntimamente relacionada con nuestro propósito, el cual le da dirección y sentido a nuestra existencia. Es un destino que elegimos y estamos determinados a llegar a él a través de metas claramente definidas [Artículo recomendado: No tengo metas ni objetivos en la vida ¿Qué hago?].

      Estarás de acuerdo conmigo en que si no tienes un destino claro, definido y motivador, no podrás enfocar tus esfuerzos, dispersarás tu tiempo, talento y energía haciendo cualquier cosa, y te sentirás perdida y sin rumbo.

      Por eso, te sugiero que antes que nada definas qué quieres (cuál es tu propósito), con un enfoque puesto no solo en ti, también en lo que puedes hacer por los demás. Piensa de qué manera podrías (y quisieras) aportar mientras disfrutas gran parte del proceso. Vuelve al punto #2 de los 13 pasos vistos en este post e indaga en cada uno de los puntos expuestos ahí.

      También empieza a explorar tus intereses y talentos. Podrías hacer una lista de cosas que te gustaría hacer y en las que eres bueno/a, esto te puede ayudar a descubrir qué es lo que te gusta realmente y qué te hace feliz. También podrías buscar actividades que te permitan explorar tus intereses y te den la oportunidad de conocer nuevas personas y experiencias.

      Recuerda que es importante disfrutar el camino y no solo enfocarnos en la meta final. A veces, el proceso puede ser más valioso que el resultado final. [Artículo recomendado: Si quieres ser realmente feliz, necesitas saber esto]

      Espero que estos consejos te ayuden a encontrar dirección y sentido en tu vida. Si te gustaría platicar en algún momento sobre tu situación házmelo saber. Sería un gusto para mi conocerte y poder ayudarte.

      Por último, te animo a descargar alguno o ambos de mis e-books, si no lo has hecho aún. Pienso que puedes sacar algo bueno de ellos en este momento que te encuentras en busca de claridad para tu vida.

      ¡Un abrazo y mucho éxito!

  4. Soy Ariadna tengo 22 años. Básicamente fui madre muy joven y estoy sin rumbo aportándole todo a mi hija, pero no pienso en mí. Eso me está consumiendo porque cuando no tengo la cabeza ocupada me preguntó una y otra vez ¿Qué hacer con mi vida? ¿Cuál es mi vocación? ¿Qué quiero ser? Y no tengo respuestas. No sé cómo seguir no soy feliz. Siento que estoy siendo egoísta con mi hija, con mi novio y sobre todo conmigo misma. Me gusta socializar, charlar y compartir opiniones, el maquillaje, decorar ambientes, pero ¿Esto puede darme un futuro? ¿Puedo encontrar la felicidad en esas pequeñas cosas que disfruto? Estoy llena de preguntas y miedos que no puedo afrontar. Esto me afecta en mi vida diaria no puedo avanzar, relajarme, fluir. Solo lo escribo como una auto crítica no hace falta respuesta, gracias.

    1. Hola Ariadna.
      Gracias por compartirnos un poco de ti y tu situación.

      No estás siendo egoísta con nadie por tener esos pensamientos. De hecho, esas preocupaciones significan que, en un sentido, estas siendo responsable.

      Cuestionarte qué quieres hacer con tu vida, significa que estás buscando respuestas. Y tomar conciencia de tu situación actual es el primero paso para propiciar un cambio.

      Las decisiones que tomes respecto a tu futuro personal y profesional, impactan también en la vida de aquellos que te rodean; de tu hija, tu pareja y todos aquellos con los que convives. Eso no es ser egoísta.

      Querer vivir mejor, y actuar de forma alineada con tal deseo, implica que también los más cercanos a ti se beneficiarán. Algunos en mayor y otros en menor grado, pero lo harán. Especialmente tu hija; si tomas un nuevo rumbo, ella también lo tomará en consecuencia. La vida de ambas cambiará.

      Ahora, la parte más importante de que necesitas considerar y trabajar en ti, son tus creencias, dudas y miedos que tienes, ya que estos suelen ser las barreras más difíciles de afrontar.

      Te preguntas si las actividades que te gustan pueden darte un futuro, y la respuesta es: Por supuesto que sí. Pero todo depende de lo que tú creas, de la confianza que tengas en ti misma y la seguridad con la que encares el reto.

      Hay persona que, en su actividad profesional, socializan, charlan y comparten opiniones. Hay quienes se dedican al maquillaje, a la belleza, al diseño de interiores, al diseño de prendas de vestir…

      Si hay persona que ganan su sustento económico a través de la entrega de productos y servicios como esos, entonces quiere decir que hay demanda y que es completamente factible para ti.

      Sin embargo, como te comentaba, todo depende de lo que creas posible, de afrontar tus miedos y estar dispuesta comenzar un nuevo camino, con corazón, entrega, constancia y disciplina.

      El cambio es posible, pero requiere tiempo, paciencia, planificación y mucha gestión emocional. Y a pesar de que no sea fácil vale completamente la pena.

      Cuida mucho las palabras de que te dices. En especial aquellas que hablan de ti y de lo que «puedes» o no lograr. Si dices «No puedo afrontarlo», entonces así será. Te auto programas para actuar acorde con «lo que crees» que puede ser, o puedes hacer.

      Te recomiendo que descargues mi e-book (si no has hecho ya), léelo y cuando termines, mándeme un mensaje para contarme qué reflexiones has tenido. Incluso podemos agendar una charla para que me cuentes un poco mejor tu situación.

      Un abrazo.

  5. Hola Maurino, soy Valeria, tengo 32 años, soy policía y tengo un hijo y pareja, que es el papá de mi bebe. Llegue a este artículo porque siento que estoy viviendo en piloto automático algunas veces, otras tengo momentos muy felices. Mi hijo es mi gran motor. En lo que respecta a mi trabajo, la verdad es que estoy cómoda es cierto, pero me daría igual trabajar de otra cosa, no es algo que realmente me inspire, hace 14 años que trabajo en esto. Referente a las pasiones, amo cantar, pero en mi ciudad eso es algo que no tiene posibilidad. En relación a mi pareja, creí estar “enamorada” anteriormente, pero luego de convivir y conocerlo en profundidad, cada vez toma más fuerza la idea de separarme, no sé qué siento realmente por él ahora, siento que él no me ama, él dice que sí, pero no lo siento ¿Qué debería hacer? Necesito sentirme viva.

    1. Hola Valeria.
      Gracias por compartir tu experiencia.

      Más allá de no tener inspiración, yo te diría que en este momento te falta un propósito claro y establecer unos motivos sólidos. Esto es clave.

      Tu hijo es tu motor, es cierto, pero lo es solo en lo referente a él; a su bienestar y su futuro. No es un motor que te impulse a hacer algo diferente con tu vida (por ahora).

      Probablemente con tu situación económica actual, te puedes permitir darle lo vital y necesario en este momento y por ese lado te sientes tranquila y cómoda. A eso me refiero cuando te digo que, no tienes los motivos para hacer un cambio (en ti). No los has encontrado aún.

      [Artículo recomendado: Cómo estar siempre motivado, aun cuando las circunstancias no estén a tu favor]

      Has acertado al referirte a la comodidad como uno de tus principales problemas u obstáculos (tal vez no el único). Cuando aceptamos la comodidad, y la dejamos entrar en nuestra vida sin poner resistencia, esta sofoca toda intención por mejorar y crecer, mata nuestra creatividad, y nos hace conformarnos con las circunstancias, a pesar de que saber en el fondo que algo no encaja como debería, y que hay algo más que podemos (y necesitamos) hacer.

      Debes saber que ese sentimiento que tienes, difícilmente te dejará tranquila si lo sigues evitando. Yo lo veo como un llamado de tu alma que, en pequeños susurros, te está impulsando a expandir tus horizontes y crecer a un nivel que, tal vez hasta este momento ni siquiera has imaginado.

      Esa inconformidad que sientes, es un mensaje desde el fondo de tu ser que te dice que NO estás haciendo todo lo que puedes, debes y necesitas hacer con tu vida; que estás desperdiciando gran parte de tu talento, tu potencial y/o tu capacidad para dar más de ti al mundo de lo que en este momento estás expresando.

      Cuando dices “Me daría igual trabajar en otra cosa”, puedo ver que no sabes qué quieres (no tienes propósito ni dirección), y si lo sabes. lo crees tan imposible que prefieres ignorarlo o evitarlo. No obstante, como te he mencionado, ese sentimiento es algo que, a menos que lo escuches y hagas algo al respecto, no te dejará tranquila ni te permitirá vivir completamente en paz.

      Haces bien al dirigir a tu hijo y darle lo que necesite hasta ser mayor. Sin embargo, debes mirar más allá del momento actual, y tener en cuenta que, tú también tienes una vida. Que entre más crece, más independiente se hace, y cuando eso pase, deberás continuar con tu vida; tener ilusiones, sueños y aspiraciones. Son estos los que le dan sentido y significado a nuestros días.

      Si desde ahora sientes que estás viviendo en piloto automático y tu único enfoque (y soporte sentimental) es tu hijo, ¿Qué será de tu vida cuando él pueda sostenerse por sí mismo? ¿Lo has pensado?

      Muchas personas, en especial las mujeres que son mamás, se enfocan tanto en cuidar y darles a sus hijos todo (se acostumbran a la rutina mientras los hijos son pequeños) y cuando crecen, se dan cuenta que ahora no saben qué hacer. Se enfocaron tanto en el ahora, que no planean ni piensan lo que será de su vida más adelante. Cuando llega ese momento sienten que es demasiado tarde, que son mayores y que ahora les toca conformarse con hacer cualquier cosa.

      Pero esto no tiene por qué ser así. La vida es un regalo que debemos aprovechar al máximo. Y nos corresponde definir qué hacer con nuestra vida en cada etapa, de tal manera que podamos sacarle el máximo partido y estar libres de arrepentimientos en el futuro.

      Y es que cuéntame ¿Qué significaría para ti poder dedicarte a algo referente al canto? ¿Puedes imaginarlo? Por favor, cierra los ojos, trata de visualizarlo y enfócate en los sentimientos y sensaciones que esto te produce. Tal vez sea algo que tiene más posibilidad de la que crees. Mucho depende de lo que tu logras ver posible.

      [Artículo recomendado: Lo que crees es – El poder de elevar tus estándares y expectativas personales]

      En relación con tu pareja, lo mejor que puedes hacer en este momento es platicar con él. Dense un tiempo (exclusivo) para tener una larga y profunda charla acerca de lo que sienten, de lo que esperan de la relación, de lo que no funciona, de tus sentimientos, de lo que no les gusta uno del otro, de los roles o responsabilidades que tienen individualmente dentro de su familia. Formen acuerdos y normas, y síganlos por un tiempo a ver cómo funcionan.

      [Artículo recomendado: Estos son los 7 mejores consejos de amor (de pareja) que alguien podrás contarte]

      Espero te sirva de algo esto que te he compartido. Ya me contarás cómo va funcionando lo que te he propuesto hacer. Si te gustaría conversar en algún momento para que hablemos con más detalle, no dudes en escribirme. Será un placer conocerte, platicar y poder ayudarte.

      Un abrazo.

  6. Maurino muchas gracias por estos consejos ilustrativos. ¿Podrías profundizar en cómo hiciste el tránsito hacia el doctorado y como afrontaste los miedos que esto genera a nivel económico?

    Un abrazo

    1. Hola María. Gracias a ti por leerme 🙂

      Antes que nada, trate de cerrar mi ciclo de manera positiva en la empresa donde laboré. Di el aviso de que en 4 semanas me iba, dándoles la oportunidad de que mientras, encontrarán un reemplazo a mis actividades. De esta manera pude irme tranquilo y satisfecho sabiendo que había complido y cerrado esa etapa de manera positiva. Esto era importante para mí.

      Por supuesto que, para tomar esta decisión, contaba con un plan, tenía ahorros, y me había informado antes sobre los requisitos para aplicar al doctorado.

      Salí de la empresa, me postulé, hice examen de ingreso, y fui elegido afortunadamente.

      Si te preguntas sobre los gastos que implica tomar estudios de posgrado, aplique para una beca federal que se otorga el gobierno mediante examen de admisión. En tal beca, trabajas con tu proyecto de investigación y recibes una mensualidad. Esto te permite estudiar, al mismo tiempo que trabajas para la misma institución y organismo gubernamental.

      Cuéntame ¿Tienes pensado realizar estudios de posgrado? ¿Cuál es tu situación? ¿Desde cuándo no sabes qué hacer?

      Espero estes muy bien.
      ¡Un abrazo!

  7. Hola Maurino
    Soy Alondra, tengo 17 años y leí tu articulo ,justo por que aun no se que hacer con mi vida. Hace tiempo tenía más o menos claro lo que quería estudiar, a que me quería dedicar, pero desde que empezó la pandemia me sentí muy desmotivada, pasaron cosas en mi familia debido a la enfermedad y más me desmotive. Para serte sincera he investigado mucho sobre lo que quiero y no sé, siento que nada es para mi.
    He hecho miles de test vocacionales y hay respuestas que no me convencen. Quiero sobresalir , pero no sé cómo. Soy muy tímida en la escuela y justo ahora lo que estoy estudiando en la preparatoria no me gusta. pero estoy a nada de terminarla y es por eso que sigo.
    Estoy a pocos meses de entrar a la universidad y no sé qué camino tomar. Me frustra saber que no pudo llegar a ser alguien importante, llegar hacer sentir orgullosos a mi familia, pero sobre todo sentirme orgullosa de mi .
    La tarea y la escuela me consumen durante todo el día. Me gusta organizar mis horarios pero no puedo cuando todo el día me la paso haciendo tarea y estudiando, porque pese a que no me gusta lo que estudio trato de sacar buenas notas. Y eso hace que no me de tiempo de poder desarrollar habilidades, o explorar dentro de mi .
    Me siento débil para enfrentarme al mundo exterior, me da miedo equivocarme, porque para ser sincera, muy pocas veces lo he hecho. Quiero crecer , quiero viajar , quiero explorar , pero ¿Cómo voy a hacer eso?
    No quiero dedicar mi vida trabajando en algo que no me guste y sobre todo trabajando para cumplir los sueños de alguien más, mucho menos para esperar un sueldo que ni siquiera me ayude a cumplirlos.
    Me gustaría que me ayudaras y que me dieras tu opinión desde tu perspectiva
    ¡Un saludo y espero tu respuesta! 🙂

    1. Hola Alondra. 🙂
      Gracias por compartirnos un poco de ti y lo que estás viviendo.

      Antes que nada te diría que liberes un poco esa presión por saber qué hacer o a que dedicarte ya que solo te va a restar claridad. Está bien que le des importancia y te felicito por ello, pero que no sea un motivo de estrés o desesperación.

      Sé que esto viene dado por el temor que tienes a equivocarte y fallar, pero a partir de ahora te invito a que te replantees la manera en que ves los errores.

      Desafortunadamente el sistema educativo nos hace mucho daño al enseñarnos que equivocarnos es malo. Nos enseñan a temer al error y evitarlo a toda costa. Sin embargo, debes saber que los mayores aprendizajes y logros que llegamos a tener en la vida provienen de la interacción que hay entre la prueba y el error.

      Es un ciclo de retroalimentación positiva del que se alimenta la experiencia y se da de la siguiente manera:

      1. Acción (Probar, experimentar, intentar)
      2. Efecto (error, acierto, consecuencia, resultado)
      3. Análisis (aprendizaje, ajuste)
      4. Volver a intentar (probar, practicar, reintentar)

      Cuando evitamos cometer errores nos privamos de un enorme crecimiento y aprendizaje. Los errores nos llevan más lejos que tratar de no cometerlos.
      Además, cuando NO nos atrevemos y no lo intentamos, evitamos que la vida nos lleve por nuevos senderos, nos privamos de nuevas experiencias y de crear nuevas posibilidades.

      Es por eso que a partir de ahora te invito a que comiences a mirar el miedo a equivocarte desde una nueva perspectiva. 🙂

      [Artículo recomendado: El fracaso es temporal y necesario]

      Por otro lado; al tener al orgullo y/o reconocimiento como un valor, tienes que definir bien qué significa para ti “ser alguien importante”, ya que esto puede ser diferente en varios ámbitos y te puede llevar a destinos muy distintos si no lo tienes claro.

      Si realmente sentir orgullo es algo que necesitas, debes saber qué es «ser importante» para ti.

      Por ejemplo: es diferente tener un puesto de gran reconocimiento y responsabilidad en una corporación, empresa o institución, que tener reconocimiento por ayudar a una causa social o al medio ambiente. El significado que tiene lo que valoras lo debes tener muy claro.

      Quieres crecer, viajar y explorar y te preguntas cómo lo puedes hacer, y la respuesta es: Paso a paso.

      La dirección y destino que quieres que tenga tu vida estará definida por lo que elijas hacer cada día a partir de hoy.

      Si ves lejano o imposible tener o lograr lo que deseas, es por que aún hay unas cuantas miles o millones acciones que debes hacer antes de llegar a ese punto, pero no quieres decir que no sea posible.

      Si comienzas desde hoy, todo eso podrá llegar progresivamente en 5 o 10 años por ejemplo.

      [Artículo recomendado: Las personas sobreestiman lo que pueden conseguir en un año y subestiman lo que lograr en una década]

      10 años te puede parecer mucho tiempo, pero te aseguro que no es tanto. Además, conforme te hagas mayor verás cómo comenzarás a sentir que el tiempo pasa más rápido.

      En 10 años tendrás 27, y en 20 años, 37. Date cuenta que, elijas o no ir por lo que quieres, de cualquier manera llegarás a ese momento en tu vida y a esa edad. Así que, qué mejor que comenzar desde ahora por el camino que te lleve hasta ahí.

      Es muy común que las personas se sientan bloqueadas por no saber lo que les gusta, pero ese solo es un ingrediente de varios que debes considerar dentro de la ecuación para saber qué hacer con tu vida.

      [Artículo recomendado: No sé qué me gusta. nada me apasiona ¿Qué puedo hacer?]

      Te invito a descargar mi ebook “Encuentra tu rumbo” si aún no lo haces, lo leas y me cuentes qué piensas. También, si te gustaría platicar en algún momento sobre tu situación con más detalle podemos hacerlo, solo escríbeme y cuéntame al respecto para ponernos de acuerdo. Sería un gusto conocerte y poder ayudarte en este importante proceso.

      Espero te encuentres bien.
      ¡Un abrazo!

  8. Hola Maurino
    Bueno, yo hace 1 año que empezó la pandemia me sentía feliz; sentía que mi vida tenía rumbo. Sabía que estudiar y todo era felicidad cuando empezó la pandemia en 2020. Me sentía bien feliz porque empezaría estudiar virtualmente. Ese año fue uno de los años que me sentía feliz. Sentía que estaba en familia, todo bien. Era una chica super feliz pero pasó navidad y tuve problemas familiares. En sí la navidad la pasé un poco sola, me sentía mal. Dije: 2021 será el año que iba estudiar y todo sería alegría, pero no fue así; volví al colegio pero esta vez 5to de secundaria me sentí rara. Cambié mucho; más callada. Me aleje de las redes, me aislaba y era todo muy diferente. Pasaron los meses y tengo que postular. A veces me pregunto ¿Qué pasa si me arrepiento de lo que quiero ser? y me siento un poco triste, me cuesta mucho estudiar. Mis notas no eran tan buenas en el colegio pero en el 2020 subieron. Puse todo de mi, pero ahora 2021 me cuesta demasiado. Me siento cansada y mis padres me obligan. Me dicen: “tienes que estudiar ,piensa en tu futuro ,que será de ti” y cada que lo dicen me da miedo. Me da miedo fracasar y decepcionarlos. Me siento presionada, estresada. Sé que no pongo empeño. Muchas veces me la paso mas viendo series que estudiando pero cuando estudio me cuesta demasiado, es como si no entendiera nada y me frustro. Y pues mi padre me dijo que si no estudio me quitara todo. Que estudie, y si no es a la buena es a la mala. Eso me aturde porque siento que no me entiende; que no se pone en mi lugar, o que es malo, pero lo quiero tanto. Es un buen padre, pero cada que hablamos de estudio salimos peleando, eso hace que no quiera hablar. No me gustan las matemáticas; me cuestan. Estoy perdida, siento que voy a fracasar. Incluso siento que quisiera volver al pasado; que mi vida vuelva pero sé que no será así. Entrar a la universidad me aterra pero más, es hacer un examen de admisión. Eso me pone triste… saber que tal vez no entre… ser un fracaso. Sé que tengo que esforzarme por lo que quiero pero cómo si no tengo metas. No sé qué haré. Es algo difícil pero trataré de dar todo.

    1. Hola Mariana.

      Antes que nada gracias por contarnos un poco sobre ti y lo que estás pasando.

      Por lo que me cuentas puedo notar que te pasa lo que a muchas personas cuando piensan en sus planes a futuro: Tienden a generalizar lo que van a vivir y la manera en cómo se van a sentir.

      Dicen frases como: «Cuando viva en aquel lugar por fin estaré tranquila y feliz», «Me sentiré muy bien cuando me compre aquel teléfono móvil», «Cuando me acepten en la universidad por fin lo habré logrado»

      Tener ilusión por nuestros planes a futuro es algo bueno. Sin embargo, el problema con ese tipo de ideas y pensamientos, es que son bastante genéricas. Creer que un solo evento tiene el poder para hacernos felices para siempre, es pedir demasiado.

      Son muchos los factores que influyen en nuestras emociones, sensaciones y sentimientos. Y cuando las cosas no son como creíamos que serían, o cuando no nos llegamos a sentir como lo imaginamos, viene un momento de desilusión, frustración o incluso de depresión.

      Nuestra felicidad, éxito y realización personal se compone de varios factores y no es un sentimiento específico.

      [Artículo recomendado: Quiero ser feliz y no puedo.

      Es por eso que a partir de ahora te invito a dejar de creer que debe ocurrir una sola cosa para sentirte feliz. Trata de ser más detallista con lo que quieres y lo que planeas, y así sabrás situar tus expectativas de mejor manera.

      Por otro lado; mencionas que no sabes qué pasará si te arrepientes de lo que quieres ser, y yo te diría que, a menos que quieras tomar un camino de conductas inapropiadas, eso no sucederá.

      Aquí es importante aclarar que una cosa es lo que quieres ser; es decir, la persona en la que te quieres convertir. Y otra diferente es aquello a lo que te quieres dedicar.

      El “Ser” involucra mucho más que simplemente tener un oficio o una carrera profesional.

      Y hablando específicamente de una carrera universitaria yo te diría que haces bien al no tomártelo a la ligera, ya que es una importante decisión que marcará tu vida.

      La mayoría de personas eligen algo que no les llena ni les motiva, y en algunos casos lo idealizan y cuando comienzan a trabajar en ello, se dan cuenta que no es lo que esperaban.

      [Artículo recomendado: Cómo elegir qué carrera estudiar con bases sólidas]

      No te debe aterrar hacer el examen y no pasarlo, te debería aterrar la idea de esforzarse por tanto tiempo para conseguir una carrera que es para ti o no te importa.

      Muchos padres tratan de obligar a sus hijos a estudiar debido a que tienen la creencia de que se necesita un título universitario para que les vaya “bien” en la vida. Desafortunadamente tal creencia suele ser errónea en la mayoría de casos…

      [Artículo recomendado: Tal vez no necesitas tener un título universitario]

      Muchos jóvenes estudian una carrera solo para tener contentos a sus padres, pero eso es un error que sale muy caro a la larga. Al final, después de graduarte, tendrás que dedicarte por los próximos 40 años a algo relacionado con tal profesión. Y si no tienes un interés o un deseo genuino por abordar dicha carrera, entonces vivirás insatisfecha e infeliz por gran parte de tu vida.

      Te recomiendo que platiques con tus padres. Tal vez no los logres sacar de la idea de que estudiar en la universidad es lo mejor, pero por lo menos pide que te den tiempo para elegir correctamente y con buenas bases.

      Tomarte un semestre o un año para informarte y probar, nunca será pérdida de tiempo. Pero en cambio, si eliges de manera precipitada; si no pasas por un proceso de exploración y autodescubrimiento, podrías llegar a terminar tus estudios en 4 o 5 años más y darte cuenta al final que lo que haces no te gusta ni te inspira de ninguna forma.

      La razón por la que hayas cambiado tan repentinamente en tu manera de actuar y sentir se puede deber a varios factores y no quisiera generalizar. Es por eso que si te gustaría que charlemos en algún momento sobre tu situación con más detalle, escríbeme, para acordar el día y hora. Será un gusto conocerte y poder ayudarte.

      También, si aún no te descargas mi ebook “Encuentra tu rumbo”, te invito a hacerlo. Seguro que sacarás algo que te servirá en este momento que estás pasando.

      Espero te encuentres super bien.
      Un abrazo.

  9. Saludos. He leído todos los comentarios y me sentí más “comprendida” de alguna forma. Hace un año me sentía tan terrible como algunos escribieron aquí por no saber cuál rumbo tomar, sin embargo poco a poco he reducido las opciones a tomar, a tal punto que me di cuenta que no necesariamente quiero estudiar para trabajar. Curiosamente si me preguntan qué quería ser de pequeña no tenía sueños a largo plazo, recuerdo que todos mis compañeritos tenían una profesión en mente, sin embargo yo me creaba una labor ficticia y aceptable para que la profesora no se ría al ser incapaz de comprender que (yo) no quería hacer nada en mi vida (en ese momento) mas que jugar. En realidad solo quería sentir el viento en mi rostro como veía que lo hacía el personaje favorito de toda mi niñez, Spirit, el potro salvaje. En mi adolescencia, cuando tocaba hacer planes de vida, también creaba una vida imaginaria y ese trabajo le entregaba al profesor y hacía otra real y honesta para mí. Sucede que tenía la estima de los profesores y pensaban que tendría un gran futuro que para ellos se traduce en una gran carrera (universitaria), buena familia (casada), religión cristiana, un legado (uno positivo) y todo me saldría bien. Cuando les trataba de decir que no quería estudiar tal carrera me proponían otra aceptable socialmente. A mis 20 años no sé si me percepción de la vida es adecuada o quizás debo buscar algo que me integre un poquito más a las ideas de la sociedad y ver un equilibrio. Lo que quiero en mi vida es vivir en una casita pequeña, sembrando mi huerta y regando mis plantas, alimentar a mis mascotas y contemplar el paisaje, conducir en bici y comer saludable. Soy muy idealista, lo sé, y por eso me gustaría poder ver qué ocurre conmigo, ¿estoy bien? ¿O existirá un punto de vista que retroalimente mi situación? Cabe destacar que por supuesto que me da miedo exponer estas ideas ante mi familia y amistades que son tradicionales y los entiendo. Sé que las personas queridas aceptarán mi perspectiva de la vida pero creo que les preocupará y no quiero que vivan así y confíen un poco más en mí, y no confían porque no he demostrado hasta ahora qué es lo que quiero exactamente en mi vida, y creo que ellos quieren que me decante por una opción y ver que me arraigo a eso. Ante todo, muchas gracias, me gustó lo que escribiste y me pareció útil.

    1. Hola Allison.

      Gracias por contarnos un poco de ti y tu historia. Estoy seguro que esto resonará con muchas personas y sentirse identificadas.

      En relación con el punto de vista que buscas, yo te diria primero que nada que no hay nada de malo en querer lo que has mencionado. De hecho es genial. No muchas personas saben lo que quieren a nivel personal y saberlo ya es una gran ventaja.

      Lo que nos has contado es cómo quisieras vivir. Y aunque aún quedan algunos detalles por considerar, lo más importante es que plasmas una manera de vivir que está estrechamente relacionada con lo que quieres y necesitas. Eso es un gran avance.

      Sin embargo, hay un detalle que debes considerar dentro de lo que quieres. Y es que, naturalmente todos pensamos en estar bien y es lo que buscamos a toda costa, pero vivir no se trata solo de nosotros.

      Está muy bien pensar en nuestros deseos y necesidades individuales. Pero dentro de tus actividades, es importante incluir aquello en lo que quieres aportar a la sociedad.

      Si lo piensas bien, de eso se trata trabajar; es entregas algo (sea un producto o un servicio) a un grupo de personas y serás recompensada de manera monetaria para comprar otros productos y servicios que necesitas.

      De esta manera se crea un ciclo positivo de apoyo y crecimiento del cual formamos parte todas las personas.

      A menos que tengas una cantidad de dinero que te permita vivir toda tu vida sin trabajar (sin aportar), es necesario dar “algo” para recibir “algo” a cambio. El este caso, generalmente el segundo “algo” se trata de dinero en recompensa o en retribución por nuestro trabajo.

      Es verdad que sabes lo que quieres para tu vida pero aún te falta considerar este último factor que te he mencionado; es decir, debes descubrir qué harás con tu vida profesional/laboral.

      Este un pilar clave para nuestra satisfacción, felicidad y realización personal a mediano y largo plazo. Y es de lo que más nos cuesta descubrir.

      [Artículo recomendado: Los 7 pilares para una vida feliz, plena y satisfactoria]

      Ser idealista no es malo ya que nos permite mejorar y tener una visión de lo que queremos. Y si me lo preguntas a mí, yo veo bastante factible que lo logres y vivas de esa manera. Mucho depende de lo que elijas creer posible para ti.

      [Artículo recomendado: Lo que crees es, el poder de elevar tus estándares y expectativas personales]

      No ocurre nada contigo, de hecho estás muy bien. Conoces gran parte de lo que quieres. Tienes un visión clara de cómo te quieres sentir y eso es maravilloso.

      Dices que no quieres estudiar para trabajar y también está bien. No necesariamente tienes que hacerlo. De hecho, los títulos aniversarios están dejando de ser cada vez menos valorados, porque no dicen nada de nuestra capacidad, entrega y disposición para solucionar problemas, hacer un buen trabajo y satisfacer las necesidades.

      [Artículo recomendado: Tal vez no necesitas un título universitario]

      Comentas que tu familia y amigos son bastante tradicionales y no puedes hablarlo abiertamente con ellos. Es por eso que, si gustas, podemos charlar en algún momento para darte algo más específico para tu situación. Házmelo saber y nos ponemos de acuerdo ¿Ok?

      Espero te encuentres muy bien. Te invito a descargar mi ebook “Encuentra tu Rumbo” si aún no lo has hecho. >>Descárgalo aquí<< y seguimos en contacto.

      ¡Un abrazo!

  10. Me siento hecho una piltrafa humana desde hace semanas que de pronto son meses.

    Esta pandemia sacó lo peor de mí. Perdí mis empresas, que a pesar de que no eran todo un éxito, pero soportaban de alguna manera mi estilo de vida, aunque en la última temporada, esta debacle se veía venir.
    Tengo más deudas que huecos de camisa de pordiosero. Vendí casi todo lo que tenía a precio de huevo para poder empezar nuevamente y ya no tengo nada.

    No puedo mantener a mis hijos que son 5, ni a mi esposa, que sé se esmera por salir adelante, ella sola, sin mi ayuda. He tratado de hacer esfuerzos pero lo único que obtengo son desplantes y frustración. He hecho lo que me apasiona, pero parece ser que el resto de personas no lo valoran, y no lo creen.

    No he pagado los servicios básicos, mis hijos no pueden seguir estudiando, he sobrevivido de la caridad de familiares, y me siento tan inútil, tan perdido y tan falto de ideas, que nada me entusiasma, ni siquiera tengo el valor ni las ganas de quitarme la vida. Así de terrible me siento, lleno de hastío por esta vida sin vida. Quisiera que mis hijos y mi esposa tuvieran la oportunidad de tener una verdadero padre y esposo que luche por ellos, que en realidad los ame y que los saque adelante, porque yo no sé cómo, no tengo ni la más remota idea. No sé qué hacer…

    Como ves, creo que más bien te deprimí o te cause tanta molestia que ni siquiera me vas a contestar y te entiendo. Todo lo que puedas decirme jamás cambiará quien soy y cómo me siento. Una basura en medio del desierto…

    1. Hola Efraín.

      Antes que nada gracias por contarnos un poco a tí y lo que estás pasando en estos momentos. Valoro tu confianza y transparencia.

      Cómo no te voy a contestar, si uno de los propósitos que fundamentan a Vida Épica es precisamente poder ayudar a personas como tú, que se han perdido o no encuentran su camino. 🙂

      Si me permites decírtelo; yo creo que esta pandemia NO saco lo peor de ti. En realidad solo revelo algunas debilidades no previstas de los negocios locales tradicionales. Y por supuesto, no solo de los tuyos. Nadie estaba preparado para lo que ha ocurrido.

      La última pandemia fue hace poco más de 100 años, en 1918. Aquella época era más austera y muy diferente a lo que tenemos hoy en día. Había solo un tercio de la población mundial actual y eran los inicios de la revolución industrial. No había tantos lugares donde se concentrarán personas (y no habia tantas personas) que produjeran contagios en masa y una propagación tan acelerada como la que vivimos en 2020.

      Las personas de aquel tiempo no pensaron en tomar medidas que nos previnieran para el futuro. Los negocios eran en su mayoría familiares, no había plazas comerciales como las conocemos hoy en día, ni tantas empresas como ahora.

      En tan solo 100 años el mundo cambio como nunca antes lo había hecho, y nadie se preparó ni aprendió sobre lo ocurrido en el pasado.

      A lo que voy al contarte esto es, que no te culpes. Desafortunadamente muchos negocios han cerrado y casi nadie lo hubiese imaginado o previsto.

      Esta pandemia no saco lo peor de ti, solo revoló las debilidades que tenían los negocios convencionales contra enfermedades de este tipo.

      Esto ha ocurrido y no podemos regresar el tiempo. Solo nos queda el reto; un desafío que te está colocando la vida para volver a salir adelante, tal como hiciste en tu inicios. Tal vez no de la misma forma, pero adoptada a las nuevas circunstancias.

      La fortaleza para hacerlo la tienes dentro. Es el amor que sientes por tu familia la que te puede (y te debe) mantener de pie. Debes volver a la contienda y levantarte; por tus hijos, por tu esposa y su futuro, el cual forma parte de tu legado.

      Ten cuenta que lo que estás viviendo hoy no va a permanecer por siempre. Y lo que decidas hacer a partir de ahora comenzará a definir su nuevo rumbo y “fraguar” su destino. Y no solo el tuyo, si no del de tu familia en conjunto.

      Antes que nada, te propongo acércate a tu esposa e hijos. Elige un día de la semana para platicar con ellos. Diles que quieres hacer una reunión familiar para hablar de algo muy importante. Llévalos a algún lugar natural donde puedas distraerte un poco de los problemas del dia a dia.

      Caminen algunos minutos y cuando encuentres un lugar adecuado, siéntense a conversar. Háblales sobre lo que esta pasado financieramente y sobre lo que estás sintiendo. Hazlos parte de la situación y permite que el amor mutuo que sienten los fortalezca.
      Busquen soluciones y lleguen a acuerdos. Permite que tus hijos participen y te den su opinión/consejo para salir de la situación. No importa que sean “niños”, también piensan y pueden dar soluciones. Además, como miembros del equipo, su opción cuenta.

      [Artículo recomendado: Crea una familia verdadera]

      Escucha sus ideas y propuestas y a partir de ahí piensa de qué manera puedes comenzar a generar ingresos.

      Si estás realmente en el fondo del hoyo entonces ya no te preocupes, no puedes ir más abajo. Lo único que te queda es volver a subir.

      Ya has tenido negocios y por lo tanto sabes bien de qué va: Cubrir una demanda, solucionar un problema o satisfacer un deseo que la gente tenga. Dar para recibir a cambio. De esta forma volverás a comenzar a girar la rueda positiva de la abundancia.

      [Artículo recomendado: Antes de crear un negocio, pregúntate esto]

      Suena muy bien y sería fantástico poder crear todos los negocios entorno a nuestras pasiones. Sin embargo, a veces nuestra pasión no le interesa a la gente o no le sirve. Por lo tanto suele ser difícil crear un negocio entorno a ello en primera instancia.

      [Artículo recomendado: La verdad sobre vivir de tu pasión]

      Con esto no estoy diciendo que crear otro negocio sea tu mejor alternativa ahora mismo. Dependiendo tu situación particular, posiblemente requieras conseguir un empleo por un tiempo mientras regularizas tu situacion y pagas tus deudas. Sin embargo, debes mirar siempre a mediano largo plazo y no quitar el dedo del renglón sobre lo que quieres.

      En cuanto a lo comentado sobre quitarte la vida, no debería ni siquiera pasarte por la mente. Olvídate de eso. Piensa que ya que no se trata solamente de ti. Están tus hijos y tu esposa, y más allá de perderte la maravilla de verlos crecer y desarrollarse, les estarías quitando tu apoyo, tu amor y tu presencia. ¡Ellos no merecen algo así!

      [Artículo recomendado: Te vas a morir, tu vida es ahora]

      Aunque tu pareja no esté recibiendo tu apoyo económico en este momento, ese no es el único apoyo que le puedes dar y que necesita ahora mismo. Acércate a ella y salgan de esto como si fueran un solo ser.

      [Artículo recomendado: Todos somos uno y todo está conectado]

      Estar o no en el mundo no se trata solo de nosotros… Al final las personas que se quedan son las que lloran nuestra usencia y por ellos es que debemos procurar permanecer lo mejor posible para ellos. Al final creo que estamos todos aqui para dar. Y querer darle fin a nuestra vida de manera intencionada aun cuando sabemos que hay personas que nos necesitan, podría ser un acto de cobardía.

      [Artículo recomendad: No esperes nada a cambio, solo da y sigue avanzado]

      Me llama la atención que mencionas: “Un padre que en realidad los ame”. ¿Acaso amas a tu hijos?

      Te recomiendo despejar tu mente para liberar tus emociones actuales, ya que te impiden ver claramente. A veces los problemas puedes abrumarnos y eso hace que tengamos perspectivas inadecuadas, que no nos ayudan a encontrar soluciones o alternativas.

      Tus hijos tienen un padre; eres tú. Y si defines a partir de ahora como uno de tus propósitos de vida, el ser lo que ellos necesitan para que crezcan como grandes seres humanos, entonces habrás sido el mejor padre que pudieron haber tenido.

      [Artículo recomendado: Crea una cadena generacional de crecimiento familiar]

      Espero te ayude de algo estas palabras. Si necesitas hablar en algún momento sobre tu situación más en profundidad, no dudes en escribirme en la pestaña contacto. Será un gusto conocerte y ayudarte.

      ¡Un abrazo!

  11. Hola Maurino:

    Desde que pasé por la primaria y secundaria, siempre me han dicho que soy muy buena estudiante y tenía bastantes posibilidades de ser una gran persona en la vida. Mis padres, profesores e incluso amigos me lo decían, yo misma lo empecé a creer y tuve todas estas metas planeadas (estudiar en la universidad, graduarme de una carrera y conseguir un trabajo suficientemente bueno como para abastecerme a mí misma).

    Cumplí los 17 años, me gradué de la preparatoria y con una muy buena noticia. Debido a mis buenas notas, fui seleccionada para estudiar una carrera en un instituto cercano (la carrera no fue mi primera opción, pero estaba relacionada con mis otras opciones así que supuse que estaba bien). Toda mi familia me felicitó y estuvo muy feliz por mí, estaban orgullosos y yo lo estuve también, conseguir ésa oportunidad es muy difícil así que me sentía muy afortunada.

    Lamentablemente el cuento de hadas acabó una vez entré a el instituto.

    Pasaba que al parecer, no era tan inteligente como creía y no era tan rápida como el resto de mis compañeros. Mis notas comparadas con la del resto eran muy bajas, me avergoncé mucho de mí misma. ¿Cómo una de las chicas más listas de la secundaria llegó a esto? me preguntaba. Por más que lo intentaba no lograba enfocarme y seguirle el hilo a los demás, me sentí horrible. Tenía una gran oportunidad en mis manos, ¿por qué la desperdiciaba y no daba lo mejor de mí?

    Los malos momentos continuaron pasando, repetí el trimestre de nuevo y las esperanzas que tenía en ser una persona exitosa y grande bajaron un 100%. Llegó la pandemia y como las clases empezaron a ser online, las evitaba por completo. Ni siquiera me esforzaba en saber qué era lo que estaba pasando, no tenía interés y estaba desmotivada, cada vez que me preguntaban “Eh, Feda. ¿Cómo va la uni?” sólo les sonreía y decía que estaba bien, cuando era todo lo contrario.

    Apenas cumplí los 19 años les dije a mis padres que no quería seguir con la carrera. Me dijeron que estaba bien siempre cuando siguiera estudiando. Les dije que este año me pondría en eso, sin embargo ya se acabó febrero y yo aún no sé qué hacer con mi vida. No sé si estudiar, no sé si trabajar tampoco, mis padres y familia siguen presionándome, preguntándome que es lo que voy a hacer pero es muy difícil hacerlo cuando yo ni siquiera lo sé. Quisiera encontrar una solución para todo pero siento que soy muy cobarde como para intentarlo, sólo me siento en mi cama, pienso demasiado y termino derramando algunas lágrimas.

    Con tu artículo me detuve y reflexioné un poco sobre mí, descubrí que hay un rumbo que me llama la atención y quisiera probar. Tengo miedo de decirle a mis padres, pensar que podrían no apoyarme y voy seguir en el mismo hoyo (sólo que ahora con 20 años) me aterra. Quiero ser alguien, quiero hacer lo que me gusta pero tengo miedo de que no pueda lógralo y fracase. No sé qué hacer y sólo quiero llorar.

    Gracias por todos los consejos.

    1. Hola Feda. Espero te encuentres muy bien.

      Gracias por contarnos un poco sobre tu historia. Valoro mucho tu confianza. 🙂

      Puedo notar que el punto de inflexión ocurrió en el momento en que fuiste seleccionada para estudiar en aquel instituto. Esto es algo que suele ocurrir no solo a ti, sino a una gran cantidad de personas que toman un “oportunidad” que consideran buena, para poco tiempo despues darse cuenta que no se parece nada a lo que imaginaron o a lo que supusieron que seria.

      Verás, todos somos susceptibles a ser “perturbados” por agentes externos o circunstancias. Cuando esto ocurre, damos un cambio drástico a nuestro destino son pretenderlo. Dichas perturbaciones yo las llamo «puertas» que se atraviesa en nuestro camino, las cuales están disfrazadas de oportunidad pero en realidad no lo son del todo.

      [Artículo recomendado: Las puertas se abren para quien las toca, pero…]

      Debemos ser muy cuidadosos con aquello que se presenta ante nosotros, ya que posiblemente aquello que parece ser bueno y brillar ante nuestros ojos, no sea lo que esperamos o necesitamos en este momento de nuestra vida.

      [Artículo recomendado: Cuidado, no todo lo que brilla es oro]

      En tu caso, cuando sentiste el apoyo de las personas que te rodean y viendo el pasado que te respaldaba, comenzaste a imaginar todo lo que podría ser en aquella escuela. Sin considerar los detalles y sin analizar si realmente era lo que querías para tu vida en este momento.

      Te entiendo perfectamente. Es algo que yo experimente cuando salí de la preparatoria (instituto) y entre a la universidad. Despues de estar acostumbrado a tener calificaciones de excelencia y ser alumno sobresaliente, llegue a la universidad y durante los primeros meses no me fue bien ni lo disfrute.

      Tuve que adaptarme; cambiando mi estregia y la forma en que estudiaba para poder volver a tener los resultados a los que estaba acostumbrado.

      Posiblemente a ti te haya sucedido eso. Y esque debes tener en cuenta que al cambiar el entorno y el grado, muchas otras cosas cambian consigo; los compañeros, los profesores, la metodología de enseñanza etc.). Posiblemente eso es lo que haya sucedido. Tal vez tu manera de llevar los estudios requería “evolucionar” para pasar a un nuevo grado escolar.

      Algo que me llama bastante la atención sobre lo que comentas es que dices que “tenías una gran oportunidad en tus manos”, pero ¿Realmente era una gran oportunidad? ¿No crees que eso lo pensaste a raíz de la manera en cómo se dieron la cosas (tus buenas calificaciones, el apoyo de maestros y padres, la noticia de ser seleccionada)?

      [Artículo recomendado: Las mejores oportunidades en la vida no surgen por casualidad]

      Afortunadamente veo que te has decidido por un nuevo rumbo y te felicito por ello. Yo te diria que lo mantengas en pie. Posiblemente lo que estabas haciendo no te interesaba ni motivaba lo suficiente y por eso no ponías el empeño necesario.

      En cuanto al miedo; deberás afrontarlo si realmente es algo que te mueve por dentro.

      [Artículo recomendado: Cómo eliminar el miedo de tu vida en 5 pasos]

      Cualquier cosa nueva que quieres hacer, al inicio te puede dar temor y puede estar llena de incertidumbre, pero con la debida práctica vas a ir mejorando y te vas a ir adaptando.

      [Artículo recomendado: 4 beneficios de ser novato-principiante que debes aprovechar]

      Además, si haces aquello que te interesa y te llama más en este momento, será más probable que hagas un buen trabajo y lo hagas con amor.

      [Artículo recomendado: Cuando la chispa en tu interior se enciende, ¡síguela!]

      La única forma de saber y asegurarte de que aquello que llama tu atención es el camino correcto es probándolo. Y justo eso es lo que te animo a hacer en los próximo dias. Realiza una prueba intensiva y mira cómo te sientes.

      Y por último. Dices que “Quieres ser alguien” y yo te digo desde ya que: “Ya eres alguien ahora mismo”. No permitas que un documento o la falta de una profesion reglada te quiten tu identidad y tu confianza en ti misma. El valor de los títulos y certificados, no es tan importante como el valor de un trabajo bien hecho; con vocación verdadera, pasión desbordante, un propósito bien definido y un significado profundo.

      [Artículo recomendado: Talvez no necesitas un título universitario]

      Tienes un gran potencial, y te lo has demostrado a ti misma en varias ocasiones. No necesitas que alguien apruebe tus capacidades, talentos o virtudes para ponerlos en marcha y a tu favor.

      Espero que estás palabras y recomendaciones te ayuden de algo. Si te gustaría que platiquemos en algun momento para tratar mejor tu situación, no dudes en escribirme. Puedes hacerlo en la pestaña contacto del menú superior. Para mi será un gusto conocerte y ayudarte. 🙂

      ¡Un abrazo!

  12. Hola
    Tengo 18 años… Termine la secundaria a los 15, y mis padres me matricularon en una universidad particular para la carrera de Ingeniería Industrial… No me opuse, porque tampoco sabía que estudiar así que solo lo acepte. Cuando estaba en el colegio me sentía una de las más inteligentes sin embargo en la universidad cambió totalmente eso, me di cuenta que no soy buena en números y me aburren las clases que estoy llevando. Ya estoy en el quinto ciclo y para cada inicio de ciclo me deprimo, porque no me gusta la carrera y lo quiero dejar… Mis padres me dicen que falta poco para que termine “que aguante”, básicamente me escogieron esta carrera porque ganaría mucho dinero y al inicio me guíe de eso, creía que todo lo que importaba era el dinero, pero quiero ser feliz. En esta vida lo que busco es felicidad. Siempre me imagino como sería si hubiera estudiado lo que quiero. Me gusta bailar, me apasiona bailar, los mejores recuerdos del colegio son cuando bailaba. Durante la secundaria, en mi mente estaba estudiar danza pero me llene de los comentarios negativos y esa idea se desvaneció. Y ahora que estoy a la mitad de la carrera creo con más firmeza que necesito intentarlo. Necesito saber si la danza es a lo que estoy destinada pero llego la pandemia y me malogro los planes. El siguiente año postulare a la escuela de danza pero me da miedo, ¿Y si no entro? ¿Y si la carrera no es como lo esperaba? ¿Y si en verdad solo necesitaba esforzarme para terminar la carrera de ingeniería?. Cada que me animo para dejar la carrera me hago esas preguntas y me deprimo. Necesito saber qué hacer.

    1. Hola Samantha.

      Entiendo muy bien tu preocupación y el miedo que tienes. No obstante, gran parte de este miedo es debido a tu edad y a la influencia tan grande que aún ejercen tus padres sobre ti.

      Las ideas que ellos tienen acerca de «lo que se debe» hacer y cuál es «lo mejor» para que te vaya bien en la vida tiene un base en sus experiencias, reglas, aprendizajes y creencias obtenidas a lo largo de su vida. Sin embargo, eso no quiere decir que sea lo mejor para ti o sea el mejor camino.

      Piensa que al final tú eres quien va a vivir aquello a lo que te vas a dedicar. Cada día vas a levantarte a trabajar o ejercer aquella actividad, profesión u oficio, y si no es algo que te mueve; algo que te inspira dar lo mejor de ti, entonces aquel “buen salario” prometido, no va a llegar. Eso sin considerar tu falta de compromiso e insatisfacción profesional que vas a vivir.

      Dime: ¿Para qué estudiar una carrera que vas a ejercer de forma mediocre y con pesar? ¿Para qué obtener un título universitario que muy seguramente no vas a utilizar? ¿Para qué perder tu valioso tiempo haciendo algo que te permite disfrutar, aprovechar ni explotar verdadero tu potencial?

      [Artículo recomendado: Cómo elegir qué carrera estudiar con bases sólidas]

      Entiendo que te puede dar miedo contradecir a tus padres, especialmente por la edad que tienes. Es por eso que lo mejor que puedes hacer es buscar un momento para conversar con ellos.

      Diles que te gustaría platicar sobre algo que no te deja tranquila, y que quisieras que se tomen un momento para escucharte en algún momento que tengas libre. Te aseguro que al escuchar esto, te pondrán atención y les interesara mucho platicar contigo.

      Cuéntales lo que quieres, lo que te apasiona, lo que te gustaría. Cuéntales también cómo te sientes estudiando ingeniería.

      Espero que a este punto, te hayas atrevido, y ya estés en la escuela de baile. 🙂

      ¿Qué hacer si no entraste? Entonces debes volverlo a intentar.

      ¿Y si no te gusta? Entonces está perfecto. Lo probaste, y si te das cuenta que no es lo que esperabas ahora estarás tranquila sabiendo que lo intentaste. Descubriste que eso en realidad no es lo que quieres y te harás más sabia y experimentada. A la vez, esa decisión te llevará a algo nuevo que seguramente ahora mismo no puedes ver.

      No te dejes paralizar por el miedo; no temas equivocarte. Si no te atreves, no progresas. A veces equivocarse es necesario para hallar una manera de lograr lo que queremos.

      Hace algunos días escribí un artículo que trata un caso muy parecido al tuyo y a lo que estás viviendo en este momento. Aquí lo dejo debajo para que des vistazo:

      [Artículo recomendado: Siento en mi corazón que debo hacer algo diferente]

      Por último, pero no menos importante, si quieras hablar en algun momento con más detalle sobre tu situación, no dudes en escribirme. Será un gusto conocerte y poder ayudarte. Puedes hacerlo en la pestaña contacto del menú superior de esta página.

      ¡Un abrazo!

  13. Hola Maurino, gracias por el post, me he emocionado. Ojalá pudiera volver atrás y tomar decisiones más acertadas y estratégicas. Lamentablemente no tengo la edad de los jovencísimos que escriben en los comentarios, me he plantado al borde de los 40 y tengo que reconocer, con dolor, que no me ha ido bien. Aunque me he esforzado y estudiado (tengo 2 carreras, maestría etc.) nunca he tenido un buen empleo, muchas veces ni siquiera estaba relacionado con lo mío (de tele-operadora, p ej.). Me he dedicado a sobrevivir y es así como ahora no tengo NADA: ni satisfacción, ni valoración, así como tampoco cosas materiales, como vivienda o ahorros. Por no tener, ahora mismo no tengo trabajo. Me informo y pienso en emprendimientos y posibles trabajos pero no veo nada claro y la mayoría son poco viables para mí. Siento sonar patética, la verdad es que es la primera vez que me expongo, nadie sabe que me siento así.
    Voy a bucear más en tu blog, a ver si encuentro inspiración

    Voy a bucear más en tu blog, a ver si encuentro inspiración 🙂

    1. Hola Gaby ¿Cómo estás?

      Puedo notar en lo que me comentas, que tiene ciertas creencias e ideas que no te ayudan en absoluto.

      Dime ¿Por qué crees que 40 años es demasiado?

      En Vida Épica somos una comunidad de personas de todas las edades, así que no tienes de que preocuparte ni pensar en eso. Toma en cuenta que cuando se trata darle sentido a nuestra vida y tomar un rumbo alineado con nosotros mismos, la edad no tiene nada que ver.

      [Artículo recomendado: Ya estoy muy viejo para esto…]

      Hay dos cosas que te invito a hacer en cuanto tengas un tiempo a solas.

      1. Toma una libreta donde hagas notas personales y escribe todas aquellas cosas que te han ido bien la vida.

      No tiene que ser algo relacionado a una profesion o algo en concreto. Simplemente escribe todo lo que te venga a la mente que ha ido bien desde que tienes memoria.

      Recuerda esos momentos lo mejor posible; imagina que estás ahí nuevamente. Y siente todas esas emociones.

      Date cuenta de que NO TODO te ha ido mal. Además ahora mismo estoy seguro que tienes muchas cosas por la cuales agradecer. ¿Tienes alimentos? ¿Tienes algun ser querido que amas? ¿Tienes un lugar donde descansar y cubrirte de la intemperie?

      Cuando nos enfocamos en todo lo que no tenemos y lo que no ha ido bien, es muy facil sentir que nuestra vida está fatal. No obstante, todo es cuestión del ángulo en que se mira y en donde decidimos poner en enfoque.

      Tienes 40 años bien vividos, pero esto aún no termina. Así que procura que los próximos 40 sean aún mejores.

      [Artículo Recomendado: Esto no se acaba hasta que se acaba, y mientras tengas vida, tienes oportunidad]

      2. Promete a ti misma que jamás te dirás cosas como “Sueno patética” “Me esfuerzo y nunca me va bien”, “Estoy muy vieja para esto…” etc.

      Las palabras que usamos y lo que nos decimos a nosotros mismos, definen nuestro auto-concepto y tienen un profundo efecto en nuestra manera de pensar, sentir y actuar.

      Cuida tus palabras, ya que se convertirán para ti en verdades incuestionables.

      [Artículo recomendado: Cambia tus palabras y cambiarás tu vida]

      Espero que el contenido que encuentres en Vida Épica te ayude a dar el impulso e inspiración que necesitas para hacer un nuevo cambio en tu vida.

      Si en algún momento quieres conversar, no dudes en contactarme. Será un concerté y tratar tu situación con más detalle. 😊

      ¡Un abrazo!

  14. Hola Maurino

    Soy una mujer de 46 años. De pequeña siempre me preguntaban qué quería ser de mayor. Dado que no sabía bien qué hacer respondía que profesora, ya que me gustaba el trabajo que desempeñaban mis profesoras. Cuando fué el momento de ir a la universidad, me decanté por la historia y me gustó. Hice el curso para hacer de profesora pero finalmente me tiró más dedicarme a la investigación, que realmente era lo que me satisfacía. Pensé que si me dedicaba a la docencia me quemaría en pocos años y tenía muchos años por delante. Renuncié a una vida cómoda para trabajar en aquello que me apasionaba y así 22 años hasta hoy.

    Seguí mi pasión pero llevo varios años acusando la inestabilidad de mi trabajo: ser autónoma que no sabe cuándo trabajas o cuándo y cuánto cobras, no saber con qué dinero cuentas para vivir, trabajar muy a menudo en categorías inferiores porque no hay demasiados trabajos técnicos, un trabajo muy exigente físicamente que me deja sin fuerzas para hacer nada más, largos periodos de tiempo sin trabajo con el consiguiente desasosiego por no tener ingresos, la preocupación por poder mantenerme a mí y a mi hijo, la difícil conciliación familiar puesto que suelo trabajar lejos de casa y en horarios diferentes, y un largo etcétera que me lleva a una gran insatisfacción. Incluso he perdido las ganas de trabajar en lo que era mi pasión.

    Ahora estoy en una encrucijada y no sé qué hacer. Lo de profesora está bastante complicado porque no abren las listas para acceder a la bolsa de trabajo de profesores y en mi especialidad hay mucha gente que está apuntada de hace años y todavía no los han llamado. Estoy estudiando inglés para tener el título apropiado para poder enseñar idioma, pero quizá me lleve un par de años o más (tampoco es que me entusiasme la idea dedicarme a esto pero no le cierro la puerta, ya que podría ser una opción).

    A veces miro anuncios de ofertas de trabajo pero no me veo en una profesión normal y corriente (supermercado, oficina, etc). Aún así, tampoco podría acceder a algunos puestos dado que siempre piden experiencia en cada tipo de trabajo. El hecho de haberme dedicado tantos años a una misma cosa me descarta para según qué puestos de trabajo. Pero el hecho de tener un sueldo fijo cada mes y saber con qué dinero cuento para vivir y hacer de más o de menos me atrae.

    Soy una persona creativa, empática, sensible, sé trabajar en equipo, sé liderar un grupo, soy conciliadora, me gusta aprender cosas nuevas, me da miedo todo lo nuevo pero puedo con ello (como casi todo el mundo). Me gustan las profesiones creativas, sobre todo el dibujo, diseño, acuarela (aunque no destaco). He pensado en estudiar algo en este sentido pero tampoco tengo ni el tiempo ni el dinero para hacerlo, ya que las obligaciones económicas no perdonan. También se me pasó por la cabeza hacer de emprendedora y hacer algún tipo de artesanía, pero tampoco sé muy bien qué hacer y tampoco tengo suficientes ahorros para emprender según qué o aguantar hasta que me gane la vida. Todas estas ideas son ocupaciones muy inestables, por lo que esto me echa para atrás.

    La verdad es que estoy un poco perdida, desilusionada y triste con lo que hago y sin saber hacia dónde tirar.

    1. Hola Natalia.

      Primero que nada muchas gracias por abrirte y compartir un poquito de ti y de lo que estás pasando en estos momentos.

      Dentro de lo que me comentas veo que tienes ese deseo por tener un ingreso estable, y por eso ves como una buena opción el tener un empleo fijo. Y en este punto debo decirte que oportunidades hay muchas, pero eso no significa que todas sean las adecuadas para ti.

      No hablo de que te contraten o no, dentro de alguna empresa o institución educativa. De hecho creo que eso es algo secundario. Tu verdadero enfoque ahora mismo es descubrir el tipo de trabajo que gustaría tener.

      Hablo de algo que puedas disfrutar en los días ordinarios, pero al mismo tiempo este alineado con algo que va más allá, que el placer o el trabajo apasionante.

      [Artículo recomendado: La verdad sobre seguir tu pasión y vivir de ello]

      Puedes ser un propósito de vida, un motivo sólido y bien fundamentado o un objetivo a largo plazo. Algo que quieras, debas y necesites lograr para sentirte bien contigo misma o para cumplir con un llamado interno o una responsabilidad adquirida (como puede ser el caso de sacar adelante tu hijo).

      Si sólo mantienes la idea de encontrar “algun trabajo” que te brinde cierta estabilidad económica, sin considerar el tipo de trabajo o actividad que quieres hacer en los días “normales”, entonces corres el peligro de encontrar cualquier empleo poco estimulante, que te haga sentir apagada, aburrida, tensa, o estresada.

      [Artículo recomendado: El peligro de generalizar y no ver los detalles]

      Dices que no te gustaría una profesión normal y corriente, pero entonces respóndete ¿Por qué no la quiero? ¿Qué tipo de profesional quiero ser en este momento? ¿Qué quiero hacer a esta edad y en esta etapa de mi vida? ¿Dónde y cómo me veo cuando llegue a los 50 o 60?

      Debes tener en cuenta que hay creencias arraigadas en nosotros, que nos limitan. Por ejemplo, dice que te gusta el dibujo y la acuarela pero inmediatamente te auto limitas y te justificas, diciendo “no destaco”.

      La mayor parte de lo que creas posible y verdadero, definirá tu futuro, y por eso es importante que te des el crédito, eleves un poco tu ego y creas en ti.

      [Artículo recomendado: Lo que crees es; el poder elevar tus estándares y expectativas personales]

      Hoy por la noche cuando estés a solas, relajada y en un lugar tranquilo, toma una hoja y escribe aquellas características que debería tener un trabajo para que fuera perfecto para ti.

      No te límites y escríbelo todo. Incluso si te vienen ideas de ser emprendedora, tambien anótalas. Y por favor nota que he dicho “perfecto para ti”, lo cual quiere decir que debe ser lo que tú realmente quieres y necesitas y no lo que la sociedad impone como ideal.

      Esto te ayudará a tener claridad sobre lo que si quieres y afinar mejor tu visión para saber hacia dónde tirar.

      [Artículo recomendado: Deja de pensar en lo que no quieres y enfócate en lo que si deseas y necesitas]

      Cuando lo tengas me gustaría que me contarás que tal te fue. ¿De acuerdo? 🙂

      ¡Un abrazo!

  15. Tengo 14 años, y realmente el futuro me preocupa demasiado. Con esto de la cuarentena tuve mucho tiempo para pensar, no sé qué me gusta, normalmente solo me la paso en redes sociales, no tengo ningún amigo al cual realmente quiera y valore, este año terminaré la primaria básica, no sé qué bachiller quiero seguir, nunca me llamó la atención una materia en específico. Mis padres dicen que no me preocupe, que simplemente disfrute el presente en mi celular o en la computadora. Desde hace meses pienso todos los días que voy a morirme, que tendré una adultez y vejez triste, que desperdiciaré mi vida, incluso empecé a pensar que no vale la pena vivir todo lo que hay antes de la muerte, no sé si solo es porque soy inmadura, estoy realmente asustada.

    1. Hola Sara.

      Entiendo bien porqué quieres encontrar algo que te guste. Es lo que la mayoría de personas buscan cuando no saben a qué dedicarse o qué camino tomar.

      No obstante, debes saber que buscar «algo que te gusta» no es la mejor manera de hacerlo. De hecho, no te lo recomiendo, ya que pensar de esa manera solo te va a llevar a ponerle un “parche” al problema de manera momentánea. Y cuando el gusto o deseo por hacer aquella actividad, carrera, materia, profesión u oficio se termine, te vas a volver a encontrar en la misma situación.

      Incluso es posible que te sientas peor a como te sientes ahora, ya que cada vez que te sientas perdida, te darás cuenta que los años están pasando y aún no logras “establecerte” en algo concreto.

      Bueno, en realidad no necesitas establecerte toda la vida en una misma actividad o proyecto, eso es lo que cree la mayoría, pero lo que sí necesitas es hacerlo durante el tiempo suficiente que te permita crear algo de valor y entrarlo a los demás. De esta forma podrás ser recompensada por lo que estás aportando al mundo, tendrás una sensación de realización y sentirás verdadera satisfacción personal.

      De eso se trata esto, más allá de querer ser feliz, tratar de satisfacerte y encontrar placeres a cada momento, necesitas buscar la manera de ponerte al servicios de los demás a través de un producto/servicios que satisfagan las necesidades, demandas, deseos, o resuelva los problemas de la gente.

      [Artículo recomendado: No viniste al mundo solo a ser feliz]

      De hecho si lo analizamos un poco, esa es la razón por la que estudiamos y nos “preparamos” por tantos años en la escuela. Para poder elegir de qué manera servir a los demás y contribuir con el progreso de nuestra especie.

      Dime ¿Te puedes dar cuenta de la enorme ventaja y bendición que tenemos como seres humanos nacidos en la mejor época de la historia, de elegir a que dedicarnos y qué hacer con nuestra vida entre un campo inmenso de opciones y posibilidades?

      Puedes convertirte en el tipo de persona que quieres ser. Solo necesitas un deseo genuino, unos motivos adecuados, y una actividad alineada con tus valores personales más profundos.

      Puedes ser bailarina profesional, instructora de ballet o natación, experta en artes marciales, creadora de contenidos en redes sociales, speaker profesional, locura de radio, ginecóloga, empresaria… Las posibilidades son incontables, y es una maravilla tener tantas opciones a nuestra disposición ¿No te parece?

      Pero debes tener cuidado en hacer lo que quieres hacer en cada etapa de tu vida. Por ejemplo, el tiempo de vida profesional de un deportista de alto rendimiento es muy corto debido a la edad.

      Por eso debes tratar de hacer en este momento lo que más adelante no podrás, para evitar arrepentimientos en el futuro.

      [Artículo recomendado: ¿Crees que nunca es tarde para comenzar? Te equivocas]

      Espero que estas palabras te ayuden de algo. Por ahora, te recomiendo que dejes la presión a un lado, y mejor de enfoques en lo que quieres ser en 10 años. Es decir cuando tengas 24 ¿cómo quisieras fuera tu vida para ese entonces? Si tienes un campo de opciones y tu vida es solo una ¿qué es lo mejor que puedes elegir?

      Escríbelo en una libreta con todos los detalles posibles, a partir de la respuesta acércate a esa visión dando pequeños y constante pasos cada día. Y no olvides vivir el presente porque el mañana jamás dejará de ser incierto.

      Pronto te escribiré para que cuentes como va todo ¿De acuerdo? 🙂

      ¡Un abrazo!

  16. Buenas Noches Maurino
    Bueno mi vida, soy profecional informatico aprendo por aprender y cumplir con mi carrera pero se me fue esas ganas lo hago por mi carrera,hice musica, y ya no me llena,fui dirigente me gusto ahora no siento nada,viaje por todo mi pais a las poblaciones me gusto pero no siento nada ahora ,en el deporte fui dirigente de la seleccion de mi departamento,ganamos un campeonato, en el trabajo siempre demuestro voluntad pero no me llena, nose como encntrar mi pasion.
    sin mas me despido Maurino

    1. Hola Victor

      Puedo notar que tienes una creencia arraigada que no te deja mirar las cosas con claridad.

      Por lo que me cuentas, pasas de una actividad a otra, y hay una constante que se repite: Algo te gusta y despues se te van las ganas. ¿Puedes notarlo?

      Lo que sucede es que te enfocas solo en la satisfacción a corto plazo.

      [Artículo recomendado: El pensamiento cortoplacista; un problema que te impide conseguir lo que quieres]

      La mayoría de personas creen que vivir se trata solo de estar en constante satisfacción y placer y por eso solo buscan actividades que les proporcionen eso; comida, televisión, música, sexo etc.

      No obstante, las actividades que solo buscan satisfacerte a corto plazo, generalmente no te llevaran a construir algo de valor a la larga.

      ¿De qué estoy hablando? De que debes establecer metas objetivos de vida. Algo que te haga sentir verdadero orgullo si lo consigues; un reto, una misión, un propósito claro y bien definido.

      [Artículo recomendado: No tengo metas y objetivos en la vida]

      Sé que puedes decirme que no es fácil, pero nadie dijo que debe serlo. De hecho cualquier cosa que valga la pena, generalmente no será fácil. Requerirá esfuerzo, tenacidad, enfoque pero sobre todo un corazón enorme.

      No tienes que encontrar tu pasión si eso no funciona contigo. Pero permíteme preguntarte:

      Si tuvieras la oportunidad en esta única vida, de convertirte en alguien mejor de lo que eres ahora, o dar a un ser amado un tipo de vida diferente a la que han llevado hasta el momento, ¿crees que sería un buen estimulante para comenzar un nuevo camino?

      Dime ¿Crees que ya hiciste y lograste todo lo que podrías mientras estás en este mundo?…

      Espero te sirva y la reflexión te impulse a tomar acción. Pronto te contactaré para que me cuentes como va todo 🙂

      ¡Un abrazo!

  17. Buenas tardes Maurino,

    La verdad que tu post me ha servido mucho, últimamente estoy muy desmotivado con lo que hago y hace tiempo que me siento muy perdido y ya no sé qué hacer.

    Soy una persona de 27 años de edad que estudió ingeniería de telecomunicaciones. Cuando estaba en la educación obligatoria perdí el interés, repetí un curso y tras acabar la educación, mis padres me sugirieron que al menos eligiera una educación post obligatoria.

    Tras elegir telecomunicaciones (siempre me ha gustado la tecnología) también hice el superior, porque me gustó, y tras acabar los estudios superiores me decidí a meterme en la carrera. Mis padres siempre me han apoyado, y conseguí sacármela en 5 años.

    El problema llegó cuando acabé la carrera, de repente me di cuenta de que los trabajos que se me presentaban no me gustaban, y para acceder a los que yo tenía en mente como «idílicos» para mi, tenía que cursar un máster para tener más sencillo el acceso.

    Tras meterme al máster, me desmotivé mucho, puesto que me veía ya con 26 años y que lo acabaría con 28, y quería tener una vida ya, tener mi casa, mi vida, mi todo, así que me salí del máster y acepte una oferta de trabajo con la empresa en la cual estuve realizando el trabajo de final de grado.

    El caso es que me pagan bien en esta empresa, pero no me gusta nada. Cuando estaba realizando mi trabajo, estaba en investigación y desarrollo, y ahora mismo estoy haciendo un poco de todo y de nada, puesto que soy «el chico polivalente», el que igual está desarrollando, igual está realizando soporte a clientes, o soporte técnico, etc…

    Ha llegado un punto que pienso que simplemente me equivoqué de carrera, siempre me ha gustado la biología (en concreto la marina), y después del batacazo con el máster (en el cual estuve haciendo prácticas, y no me gustaron nada, por eso lo dejé principalmente) y del batacazo con mi primer empleo, ando muy desmotivado.

    Me gustaría dejarlo todo y buscar otra cosa que me guste, pero tengo ese gusanillo de pensar que igual me cambio a otra cosa y resulta tampoco gustarme, y encima con peores condiciones que ahora…

    Ha llegado un punto que simplemente ya no sé que es lo que me gusta y lo que no me gusta. Pero la verdad, no quiero pasarme así el resto de mi vida. Quiero encontrar algo que me llene, aunque sea cobrando menos, pero no sé ni por donde empezar.

    En fin, un abrazo enorme.

    1. Hola Juan Carlos, cuéntame ¿Por qué crees que necesitas estudiar una maestría para acceder a ese puesto “ideal”? ¿Es una especialidad donde requieras licencia para laborar en dicha área?

      Me comentas que la necesitas para tener más sencillo el acceso, pero… que pasaría si solo fuera una creencia errónea que te impide ir directo al punto y obtener el puesto.

      En realidad son muy pocas la profesiones que requieren de una licencia para aplicar. Generalmente lo que una empresa necesita es que aquella persona que contratan cumpla con las necesidades y exigencias que el puesto demanda. Es lo único. Si hay una persona que puede hacer el trabajo y se adapta al equipo de trabajo lo van a contratar.

      Te recomiendo este artículo: Tal vez no necesitas un título universitario.

      Hasta ahora has seguido la receta impuesta por la sociedad, y no te culpo, el sistema esta creado así. Yo tambien pase por algo muy parecido y no somos los únicos.

      Equivocarse de carrera no es malo, lo malo es darse cuenta y no hacer nada al respecto. Así que expresar tu inconformidad ya es un buen punto de partida.

      Hay algo en tu escrito que me llama la atención. Das a entender que temes cambiarte a otra cosa que tenga peores condiciones que las que tienes ahora. Pero esta idea no funciona a largo plazo, de hecho es peligrosa.

      Es como decir: “Esto es malo pero no lo suficiente, y por eso me voy a quedar así; insatisfecho e infeliz. Pensando que pude hacer algo mejor con mi vida pero nunca me atreví”.

      Los años van a pasar y debes evitar a toda costa tener arrepentimientos en el futuro por no hacer lo que sentías que necesitabas hacer.

      Sé que en este momento no lo tienes claro, pero puedes comenzar por algo que si sabes: Sabes que no quieres vivir así. Sientes que tienes mucho más que dar al mundo. Eres consciente de lo que no quieres o no te gusta y ahora es momento de descubrir lo que si quieres y dar un primer pasó en aquella dirección.

      Artículo recomendado: Cómo dejar el trabajo de la mejor forma sin meterte en aprietos.

      Espero te ayuden de algo estás palabras y recomendaciones. Pronto te escribiré para que me cuentes como va todo.

      Ahora mismo estoy formando un grupo de personas que están en una situación parecida a la tuya y necesiten ayuda y apoyo para clarificar su camino y descubrir de una vez por todas lo que quieren hacer con su vida. Muy pronto te enviaré más información al respecto por si gustas participar. ¿De acuerdo? 🙂

      ¡Un abrazo!

  18. Hola Maurino , muchas gracias por el valor que aportas con este artículo .

    Yo tengo 19 años , lamentablemente deje de vivir mi vida hace bastante tiempo, me dedique a sobrevivir , era ese chico del que todos tenían esperanza , el chico abanderado , aplicado , con un gran futuro, viví muchos años haciendo lo que los otros querían de mi y no lo que yo quería.
    comencé una carrera en salud , pensé que era para mi , quería ayudar a las personas pero al final sentía que lo que me enseñaban era inútil y estaba desperdiciando mi tiempo , ese año tome grandes hábitos y leí mucho , me sirvió para desarrollarme , al próximo año comencé una carrera más para probar pensando que podía llegar a gustarme , aunque muy en mi interior se que lo hice por no decepcionar a mis padres , aún estoy en la carrera al ser online no me causa demasiadas perdidas de tiempo , pero estoy pensando dejarla ya que no siento pasión por ella .
    Estuve estos meses reflexionando mucho y descubrí muchas cosas en mi , descubrí que adoro escribir y reflexionar , descubrí la fuente de muchos de mis miedos y cosas en las que fallaba , mi miedo me hace mantenerme en esa carrera y hasta buscar otra , pero realmente no me gusta la metadologia de la universidad , creo que aprendo mucho más por mi mismo.

    Hoy en día me encuentro en busca de mi propósito me siento perdido , creo que cada vez estoy más cerca pero a la vez lejos , estoy conociéndome a mi mismo pero es difícil para mi ,hasta hace poco no podía ni siquiera saber cuál era mi color favorito o comida .

    No quiero alargar mucho esto , te agradezco mucho tu trabajo , si es posible me gustaría hablar contigo, ya que no tengo personas con la que pueda hablar de todo esto , por lo que creo que puedes ayudarme mucho, pero entiendo si no se puede .

    Saludos y gracias de verdad.

    1. Hola Kevin, te entiendo perfectamente. De hecho me siento identificado de alguna manera cuando te refieres a ese chico aplicado y abanderado…

      Afortunadamente te has dado cuenta de tu situación y ahora eres consciente de lo que no quieres.

      Quieres encontrar tu propósito de vida, pero posiblemente aún te quedan muchas dudas y no hay nada que termine de agradarte lo suficiente. Es completamente normal, es un proceso de introspección, exploración, acción y cambio que va a llevar tiempo, pero te aseguro que vale la pena y vas a lograrlo.

      Por supuesto que podemos charlar por videollamada. Para mi será un placer ayudarte. Si te parece bien, te invito a que te dirijas a las pestaña contacto del menú superior. Dentro encontrarás un pequeño formulario; solo tienes que rellenarlo y escribirme tu mensaje para ponemos de acuerdo para concretar el día y la hora.

      Espero se encuentren muy bien, tú y tu familia.
      ¡Un fuerte abrazo!

  19. hola tengo 27 años estudie 5 años enfermeria porque mi mama me lo recomendo, ,luego de titularme he trabajado en varias oportunidades pero nada estable ya que aca en mi pais no hay mucho campo laboral. esto ultimo me ha frustrado. y me ha llevado a preguntarme si la enfermeria es lo que realmente quiero para mi vida. una vida con turnos diferentes, poco descanso, regulares habitos etc. (entre todo esto de no encontrar un trabajo con mi madre nos instalamos con un local de resposteria, que nos ha ido muy bien, pero no me veo toda mi vida aqui-
    por otro lado amo el deporte soy corredora de mountainbike, me hubiera encantado ser profesora de educacion fisica o algo relacionado con eso. ahora me encuentro en compitiendo en categoria elite por lo que entrenar, descansar y tener buenos habitos son parte fundamental. pero la mayoria de las veces me cuestiono que esto es lo que me hace feliz pero no me va a ayudar a conseguir una casa o un auto. he pensado ultimamente en volver a estudiar una carrera tecnica relacionada con contabilidad, para poder trabajar en horarios relativamente comodos y poder solventar mi carrera como deportista.

    1. Hola Pia.
      Sabes, por lo que me cuentas, creo en el deporte encuentras lo que necesitas. Lo que sucede es que tienes una creencia respecto a esa actividad, que no te ayuda.

      Dices que te hubiera encantado ser profesora de educación física o algo relacionado con el entrenamiento físico y el deporte. Entonces, ¿Por qué no pensar en seguir ese camino? Es decir, si piensas en estudiar una carrera técnica relacionada con contabilidad, ¿por qué no estudiar algo relacionado directamente con el deporte?

      Ahora, posiblemente ni siquiera necesitas estudiar un carrera universitaria, tal vez lo que necesitas es definir de que manera quieres ayudar a la gente y qué servicio o producto quieres entregar.

      Puedes ser profesora de educación física en una escuela, pero también por ejemplo, puedes elegir trabajar en un gimnasio, o dar clases particulares para ayudar ponerse en forma, puedes incluso comenzar a dar clases por Youtube.

      La idea de que no puedes comprar una casa o un carro dedicandote al deporte, es una creencia preconcebida que te esta nublando la vista. Esta creencia lejos de ayudarte, esta afectando tu futuro y tu felicidad.

      Piensalo; si la idea de que gente no pudiera vivir del deporte fuera verdad, entonces nadie se dedicaría a algo así. Por eso importante que cambies esa creencia y confíes en ti.

      Cuando una persona hace las cosas con amor, difícilmente hará un mal trabajo. Es por eso que no tienes que preocuparte o tener miedo de hacerlo mal o a medias. Si de verdad es una actividad que sientes que es lo tuyo; te divierte, te entusiasma, te motiva… entonces no tiene caso que busques por otro lado sin antes probarlo.

      Espero te sirva y te haga reflexionar, pero sobre todo te ayude a tomar acción. 🙂

      ¡Un abrazo!

  20. Hola tengo 25 años y lo que me sucede ami es que Insisto mucho en mis sueños y recibo muchos NO como respuestas y eso es muy frustrante. Me da miedo de ser perseverante en algo que no sea para mi. y ademas no puedo verme en otra area, toda mi vida soñe con lo mismo y me costaria mucho aceptar que eso ya no funciona y buscar otra cosa

    1. Hola Evelyn.

      ¿Podrías contarme un poco más sobre tu situación? Si no te sientes cómoda dando detalles aquí, puedes escribirme en privado. Solo quiero darme una idea más amplia y darte un consejo más adecuado.

      Por lo que me cuentas, puedo ver que tienes claro lo que quieres y eso es genial. Sin embargo crees que eso podría ya no funcionar en estos tiempos. ¿Podrás decirme por qué lo crees así?

      ¿Por que recibes rechazos? ¿Te lo has preguntado? Es por una falta habilidad y preparación o una carencia de talento. Esto es muy importante que lo tengas claro ya que la habilidad y la maestría se obtienen a través de a práctica, la retroalimentación y la repetición.

      Estos elementos por sí solos son capaces de superar con creces la falta de talento nato que puedes padecer.

      Una persona preparada y que sabe lo que quieres llega más lejos que una dotada de grandes dones que prefiere no ponerlos al servicio de los demás o no sabe utilizarlos.

      incluso el rechazo que estás recibiendo se puede deber a algo complementario pero que es vital en el área que quieres abordar. Por ejemplo, un cantante puede tener la mejor voz del mundo, pero al tener una apariencia descuidada podría no gustar al público y esto es vital para alguien que vive de su imagen y expresión corporal.

      Otro ejemplo: Cuando una persona se presenta a una entrevista de trabajo para un puesto clave de la empresa, y el entrevistado llega temeroso, cohibido y apagado, sobra decir que será rechazado.

      En vez de sentirte mal por los «noes» que has recibido, te aconsejo pienses en la razones o aspectos que no están a tu favor. Puede ser la edad, tu condición y forma física, tu salud… encuentra aquello que sientes que no te está ayudando.

      Espero te sirva. 🙂
      Un fuerte abrazo.

  21. hola soy un chico de 19 años que no se que hacer con mi vida, arranque una carrera y la deje, empece otra convencido de que era lo que queria, ahora nuevamente perdi el rumbo y me siento desmotivado para seguir estudiando, no encuentro cual es mi pasion y siento que mi vida no tiene sentido

    1. Hola Julian, Gracias por tu comentario 🙂

      No tienes que encontrar tu pasión si no es algo que te funciona. Puedes definir tu propósito de vida a partir de tus intereses, tus valores personales, tus deseos o de los momentos de orgullo que has tenido.

      La pasión por una actividad se puede terminar, pero un propósito va más allá que solo una satisfacción momentánea. Piensa a largo plazo.

      Si solo tienes esta vida, ¿Qué sería lo mejor que puedes hacer con ella?

      No tienes que responder en una tarde, o en un día. Tomate tu tiempo, y no te apresures. Más vale saber a dónde vas, que comenzar sin rumbo, sin entusiasmo y sin motivos.

      Un Abrazo.

  22. Hola Maurino

    Este ha sido el post más acertado que he podido leer durante estos días, porque siendote muy honesta ya crucé límites y definitivamente siento que mi vida no tiene sentido. Me siento más que todo culpable, siento que soy la autora de todo. Tengo 25 años y soy un completo fracaso, encontré mi primer empleo hace dos años y no funcionó sólo dure 2 meses porque no me daba el tiempo con la Universidad. La cosa es que termine mis estudios y antes de graduarme mi mamá se enteró de una vacante y entre a trabajar en lo que parecía una buena empresa, pero resultó que había un extremo mal ambiente laboral y las funciones que desempeñaba estaban muy diferentes a lo que yo esperaba. Literalmente no tenía voz y voto, me la pasaba sentada todo el día a veces sin hacer nada, tenía que salir a la calle, visitar clientes, cumplir metas con lo cual no me estaba yendo nada bien, entonces empecé a sentirme en el lugar equivocado, me sentía bastante mal tanto que desde que ingrese prácticamente tenía ganas de renunciar, estuve buscando empleo sin resultados, mi compañera mas cercana consiguió empleo en otro lugar y se marchó y pues cada día estaba peor, dejé de comer, lloraba todos los domingos como una niña chiquita cuando ya me tocaba regresar allá el lunes. En las mañanas no quería vestirme, se me agitaba el corazón, me sudaban las manos, fue una insatisfacción tan grande que de verdad no lo puedo explicar. No se porque me sentí así, la idea de renunciar no estaba en mis planes pues hay que trabajar, no siempre todo te tiene que gustar, a parte no tengo mucha experiencia laboral, la cosa es que el 22 de julio después de hablar con mi familia y 8 meses de trabajo renuncie, ya no podía más, voy a irme a otra ciudad a buscar empleo allá y ahora e empezado a sentirme mal otra vez porque tal vez no consiga empleo nunca más, eso me atormenta y creo que tal vez debí quedarme en mi empleo, aguantar hasta que ya no más o tal vez hasta el año, aun sintiéndome mal no se sí fue una buena decisión, y pues siento que agote todas mis oportunidades. Siento que no doy más, lo juro. Tengo miedo de haberme equivocado otra vez y que me cueste muy caro. Serías tan amable de brindarme un consejo gracias.

    1. Hola Kathy. Desde mi perspectiva creo que no te equivocaste, además recuerda que equivocarse no esta mal cuando aprendes de ello, pero por supuesto que no fue un error. Por lo que me cuentas habías llegado al límite. Tu compañera se fue a otro trabajo, dejaste comer y cada lunes era una pesadilla. No tenías que soportar más tiempo así.
      Tienes 25 y claro que no has agotado todas tus oportunidades. Las oportunidades son inmensas. Lo que estás viviendo actualmente en algún momento va a pasar, y lo recordaras como un instante clave en tu vida que definió tu rumbo.
      Ahora lo más importante es que definas lo que de verdad quieres, con toda la calma posible, ya que si te vas a otra ciudad a ver que encuentras, y no sabes lo que quieres encontrar, entonces encontrarás cualquier empleo que te haga sentir igual.
      Cambiar de ciudad o cambiar de trabajo no solucionará el problema, cuando no sabes hacia dónde vas.
      Antes de seguir avanzando, toma una pausa y redefine lo que quieres hacer con tu vida en este momento. No en 10 años ni en 20, sino ahora mismo. Si no vas a volver a tener 25 años jamás ¿Qué sería lo que te gustaría hacer ahora? Algo que te causará mucho orgullo y cero arrepentimientos en el futuro.
      No vayas a deriva aceptando lo que te trae la suerte o la casualidad, define lo que quieres y a partir de ahí actúa.
      Si quieres entrar en un poco más en detalles y darte un consejo más específico para tu situación, por favor escríbeme, será un placer leerte y ayudarte. 🙂

      1. Hola Maurino, muchísimas gracias por esa respuesta tan sincera y profesional de tu parte porque me va a ayudar muchísimo, me tranquilizó por un lado, pero también me aterrizó por otro, la parte que dices que debo tomar pausa y redefinir me impactó mucho, porque a mi eso siempre se me ha echo difícil, siempre me ajusto a las circunstancias, a lo que debo hacer, a los concejos de los demás, (Ejm: Mi madre) del como debo actuar ante una situación dada,de hacer sacrificios, para serte sincera nunca he echo algo arriesgado que necesite por más que me nazca del corazón, no porque no me haya preguntado que quiero, sino porque desestimo la Idea de poder hacer algo al respecto, esta es la primera vez y eso que con mucho miedo y después de pensarlo por meses y creo que es eso lo que me ha desorientado. Entonces como una persona como yo hace para redefinir su camino, hacia donde va, porque lo único que quiero es paz, tranquilidad, dejar de pensar y que vuelva ese deseo gigante de seguir adelante y no me he planteado nada más.

        Gracias una vez más por leerme y tomarte una parte de tu tiempo para ayudarme… Dios te bendiga y muchos Saludos.

        1. Hola de nuevo Kathy,

          El miedo lo vas a sentir, porque no es algo que hayas hecho antes, pero ante eso debes de mirar tu vida como una oportunidad irrepetible.

          Si no haces nada arriesgado, entonces te vas a perder de muchas oportunidades a lo largo de tu vida, porque siempre tendrás que tomar decisiones que pongan en riesgo tu sensación de seguridad.

          Incluso no tomar una desicion ya es una decisión por si sola. Toma en cuenta que si no tomas tus propias decisiones para dirigirte por donde quiere ir, entonces la vida te llevará a deriva, a cualquier lugar.

          Si quieres un consejo para dejar de pensar y tener tranquilidad, entonces será que decidas que quieres (desde el corazón) y tomes acción inmediata, por que si no lo haces se generará un mar de dudas que te impedirán comenzar. Simplemente, piensa, decide y actúa. Pero no lo pienses tanto, porque mucho análisis te generará parálisis.

          Deseo que todo vaya muy bien. Gracias por leerme.
          Un abrazo.

  23. Hola Maurino:

    Te cuento, soy profesora de enseñanza media y actualmente tengo 26 años. Estudié pedagogía sin saber mucho de se que se trataba la carrera, me fui a otra ciudad siguiendo a mi novio, y bueno, pedagogía fue la primera carrera en la que quedé y decidí estudiar sin pensar mucho en ella. (siempre odié ir al colegio, pues todos estaban siempre estresados, profesores y alumnos, cosa que no le preste mucha atención al matricularme en dicha carrera), seguí a mi novio sin analizar que era lo que realmente me apasionaba y gustaba (sigo sin saberlo), pues lo único que quería en ese momento, era que mi novio cumpliera su sueño de vida (primera mala decisión) y bueno mis persona venia después.

    Al pasar un año, termine mi noviazgo, lo que provocó que quedara sola en esa ciudad, mis padres muy enojados (por haberme ido tan lejos detrás de mi novio) me ayudaban muy poco y eso provocó que tuviese que estudiar y trabajar para poder sobrevivir y así terminar esa carrera (La terminé porque no quería volver a mi ciudad natal sin nada y fracasada). Mientras estaba estudiando dicha carrera, me comenzó a gustar un poco, los ramos eran entretenidos y todo lo demás, pero lo malo de todo eso, es que «ejercer la profesión» es una real tortura, el sistema educativo de mi país es muy explotador, trabajo hora extras sin remuneración (planificaciones, preparación de pruebas y guías en mi «tiempo libre»), los alumnos son prepotentes y agresivos y los apoderados justifican y apoyan en todo a sus hijos, independiente si el niño haya hecho algo malo o no. Y ese tipo de situaciones provocó una sensación de angustia y estrés muy terrible en mi, al punto máximo de llegar a odiar mi trabajo. Con apenas unos meses de trabajo, me cambie de colegio y sigo sintiendo lo mismo, pero esta sensación es algo colectivo en el gremio de profesores. me siento desampara, pues esta situación no cambiará, de echo va de mal en peor.

    En resumidas palabras, tuve una vida universitaria muy esforzada, siempre tuve la esperanza de encontrar un buen trabajo, pero no me resultó.

    Después de pasar casi dos años ejerciendo, e intentar darme todos días animo, de que será un excelente día, de que hoy ningún niño reaccionará mal, de que esto me gusta (solo lo pienso, no lo siento así), siento y veo que esto ya no da para mas, estoy cansada de llegar a casa llorando de frustración y con un montón de pruebas y guías en mi mesa, esperando ser revisadas.

    Finalmente, he tomado la decisión de que debo cambiar de rubro, que ya no puedo hacerme mas daño, que debo darme la oportunidad de ser feliz. Pero todo se viene abajo, cuando se me vienen pensamientos negativos como: «invertiste 5 años de tu vida estudiando, invertiste 2 años mas ejerciendo dicha profesión, ya es tarde para cambiarte, estas vieja ( 26 años), ni siquiera sabes lo que te gusta hacer, llevas tiempo pensando en una idea pero no haces nada, piensas y piensas, eres pobre, si no trabajas no tienes para comer, estas destinada al fracaso», y cosas así.

    Y es así, como llegué a tu pagina, tratando de encontrar una forma de salir adelante, algo dentro de mi quiere hacer algo nuevo, pero no se por donde comenzar, tengo miedo de elegir algo nuevo y fracasar, siento que es necesario estudiar una carrera pero me da miedo elegir algo y volverme a equivocarme. Por suerte no tengo grandes deudas y estoy dispuesta a volver a trabajar y estudiar a la vez (Si pude una vez, ¿por que no podre hacerlo dos veces? :D) necesito auto descubrirme y encontrar algo que realmente me apasione y me llene, no quiero que se me pase la vida en algo que me entristece (de eso estoy segura).

    Por favor, dame algún consejo ¿Será bueno renunciar? ¿Que harías tu en mi caso? ¿Por donde comienzo? ¿Es normal tener miedo? ¿Que profesión sería una buena opción?

    Pd1: Algo que busco, es que el trabajo que realice sea proporcional al dinero que recibo, ya no quiero trabajar gratis.
    Pd2: Algo positivo en mi vida es que no tengo hijos (Con mucho respeto para las tienen)

    Disculpa mi mala redacción, pues tengo mi mente muy agobiada y me cuesta mucho hilar ideas.

    Muchas gracias por leerme 🙁

    1. Hola Alejandra
      Primero que nada gracias por tu comentario y gracias por leerme tú a mi. 🙂

      Entiendo cómo te sientes, esa sensación de desgana y pesar cuando llevas bastante tiempo haciendo algo que no te gusta ni te satisface. Pero a pesar de ello, me da mucho gusto que conserves una chispa de esperanza, y quieras hacer un cambio en tu vida.

      Sé que sobra decirlo pero de ahora en adelante, trata de basar tus decisiones en tu bienestar y tu futuro, y no en el bienestar de alguien ajeno. Alguien con quien podrías cortar relación de un momento a otro.

      En cuanto a tu trabajo actual, definitivamente tienes que dejarlo. No tiene sentido desperdiciar tu vida haciendo algo que solo te causa tensión y malos momentos, e incluso más adelante te podría traer problemas de salud. Solo considera guardar dinero de respaldo suficiente para conseguir otro trabajo y poder vivir varios meses sin ingresos. O buscar algo antes de renunciar.
      Aquí todo depende de la forma en como tú te sientes.

      Aquí te dejo este artículo que escribir hace poco: Cómo dejar el trabajo de forma exitosa. Espero te ayude.

      Por supuesto que es normal tener miedo. Somos seres que tendemos a pensar en el futuro; en aquello que nos puedes afectar o dañar, es por eso que nuestra imaginación vuela. Y cuando hacemos aquello que no hemos hecho antes, o pisamos un terreno que no conocemos, entonces sentimos temor. Pero detrás de ese miedo esta un campo de oportunidades y crecimiento, y es por eso que necesitas afrontarlo.

      Artículo recomendado: Cómo eliminar el miedo en 5 pasos.

      Necesito saber un poco más detalles para darte un consejo más acertado respecto a cómo empezar y qué profesión tomar, así que si te gustaría platicarme un poco más de ti y tu situación, por favor escríbeme, será un placer ayudarte. 😉

      Un abrazo.

  24. RACION PARA QUE TE LLAME EN 10 MINUTOS. (MAGIA BLANCA) Piensa en la persona con la que quieres estar di su nombre para ti 3 veces. Piensa en lo que quieres que ocurra con esta persona en la siguiente semana y repítelo para ti 6 veces. Ahora piensa en lo que quieres con esa persona y dilo una vez. Y ahora di Rayo de luz, yo te invoco para que desentierres a (SU NOMBRE)de donde este o con quien este y le hagas llamarme hoy mismo enamorado y arrepentido. Desentierra todo lo que esta impidiendo que (SU NOMBRE)venga a mi (TU NOMBRE).aparta a todos los que contribuyan a que nos apartemos y que solo piense en mi (TU NOMBRE)que el me llame ..Gracias, por tu misterioso poder que siempre cumple con lo que se pide esto lo hago con mucha fe Luego tienes que publicar la oración tres veces, en tres sitios diferentes. Suerte. (SU NOMBRE) en este momento en cualquier lugar. En este momento tu pondrás tu concentración y tus pensamientos de nuevo en mí (TU NOMBRE) tu entiendes que no puedes vivir sin mí. En este momento comenzarás a descartar tu orgullo. En este momento tu estás dispuesta a llamarme. En este momento estás pensando en mí (SU NOMBRE)?Va a tratar de resistir. No te resistas. Si tú (SU NOMBRE) no me llamas ahora, me vas a llamar más tarde. Pero ahora tu puedes estar segura de que me llamarás. Tu entiendes que estás enamorada de mí y no puedes estar sin mi presencencia. En este momento tu piensas en mí(SU NOMBRE) invoco los tres ángeles, Miguel, Gabriel y Rafael, para iluminar tu corazón (SU NOMBRE) y deshacer cualquier duda. Lo que Miguel expulsará cerca de ti es el espíritu del mal, todas las influencias del mal. Gabriel para anunciar a ti (SU NOMBRE) mi nombre (TU NOMBRE) que soplen al oído la palabra amor y te acuerdas de mí (TU NOMBRE) anuncio a su ángel de la guarda. Rafael para que utilice el bálsamo curativo para sanar la desconfianza que se ha desarrollado en tu corazón, y para mantener abierta la cicatriz del amor y el deseo hacia mí (TU NOMBRE) Que así sea. Con todo mi amor! Cuando este mensaje se publica en dos minutos ella tendrá un impulso irresistible para que me llame. Cederá a lo que estoy esperand

  25. Hola Maurino,

    Muchas gracias por el artículo, cuando terminé de leerlo me dieron ganas de que fuese más exhaustivo.
    Bueno, estoy bien perdida y creo que he dado muchas vueltas en mi vida, ya tengo más de 25 años y pasé por unos años de estudio en sociología, que los elegí cuando tuve un problema en la postulación a las universidades pero mi sueño era medicina, por lo tanto, tambien intenté un tiempo muy corto el area de salud pero al venir de sociología mi mente estaba muy amplia y más critica y no me apasionó para nada ver quimica por ejemplo… luego seguí mi sueño muy segura que se convirtió en estudiar danza, y al tercer año tuve un esguince en el pie muy grave, pero eso no me detuvo y continúe pero ya en cuarto año situaciones familiares hicieron que cayera en una fuerte depresión y no puse seguir sosteniendo la carrera, y me alejé de la danza, y este año con la oportunidad de volver a terminarla, no quise, no sé bien por qué, pero no quise. Mi sueño era estudiar danza y luego seguir un postgrado teorico en francia para poder unir la danza con una cuestión más sociologica, y bueno ahora estoy pensando en ir a francia y partir de cero en un pregrado de esa indole…

    1. Gracias Antonia por tu comentario 🙂
      Cuentame ¿Por que quieres hacer un postgrado?

      Supongamos que ya lo tienes ¿Después de esto que sigue? ¿Cúal es la finalidad de hacerlo?

      Plantearte estas preguntas te puede ayudar a clarificar.

      Por otro lado, La depresión de la que me hablas ¿ha pasado? ¿Qué sentiste dentro al no querer continuar con la Danza?

      ¡Un abrazo!

  26. Hola! Me gustó mucho la nota, y pude sacar muchos consejos prácticos. Soy madre joven y empecé a estudiar con la seguridad de que era la carrera mas acertada, pero con el tiempo me fui desilusionando mas que nada de la gente y de la forma en que nos enseñaban los profesores, me desencante de lo que había elegido, pero algo me dice que es ese el camino, y que siga, aunque terminé mi cuarto año y apenas estoy en segundo, no quiero dejar la carrera hermosa que elegí, el mundo es cruel pero es competitivo y hay que hacer las cosas lo mejor que salgan. Hoy en día me tomaré un año para hacer otra cosa y ojalá pueda volver, porque a pesar de todo aun quiero recibirme. Aunque siempre me quedará la duda de si hubiera estudiado algo más fácil, ya estaría recibida. Esa es mi confusión y mi arrepentimiento, pero o me pongo a lamentarme o sigo hasta terminar. Me va a llevar el doble de tiempo, ya lo se, pero es el camino que ya elegí.

    1. Hola Katja. Gracias por tu comentario 🙂
      ¿Sabes? por lo que me cuentas, te aconsejo que pienses en tus razones por las cuales quieres recibirte.
      Comentas que pudiste haber tomado una carrera más fácil y titularte en la mitad del tiempo, sin embargo, debes repensar un poco eso… En vez de pensar en una carrera fácil o difícil, preguntate que quieres hacer en un dia ordinario, cúal ese estilo de vida que quieres, y de qué manera te gustaría contribuir para recibir dinero a cambio.

      La carrera es solo el inicio. Recuerda que al terminarla, estarás dedicando tu tiempo y energía en una actividad que debe tener sentido para ti; Que te lleve hacia un objetivo personal grande, te motive y además disfrutes del proceso.

      Un abrazo. 🙂

  27. Hola Maurino

    Muchas gracias por este excelente artículo. Sabes hace algunos meses me sentía totalmente perdida, sin rumbo, te cuento un poco por qué.

    Hace casi un año decidí dejar mi empleo porque decidí ser madre y quiero ser madre de verdad no de tiempo parcial si no de tiempo completo.

    Estuve 1 año trabajando después de que nació mi hija y de verdad no sabes lo difícil que fue, veía a mi bebé 2 ó 3 horas al día, para nada era lo que quería,como tu lo has dicho en varios artículos cambiaba mi tiempo, mi vida por dinero y lo peor de todo esa personita la menos culpable era la que estaba sufriendo las consecuencias de mis decisiones.

    Finalmente ahí estaba yo por segunda vez sin saber que hacer con mi vida (la primera fue al decidir que carrera estudiar), ya había dejado mi trabajo y ahora? sabia perfectamente que no quería ser ama de casa y lo digo con todo respeto para las amas de casa, tenia varias ideas pero me sentía perdida.

    Afortunadamente leyendo tu blog y otras cosas poco a poco he ido aclarando mis ideas y sabes confirmo que cuando deseas algo llega a ti.

    A finales del año pasado mi esposo me regalo un curso increíble casi puedo decir mágico,me ayudo tanto a aclarar mis ideas, a hacer un viaje de introspección y desempolve a esa niña interior que hace mucho había perdido y aquí estoy Maurino mejorando poco a poquito, reencontrándome, rescatando de entre las cenizas todo lo que había dejado de ser y envuelta en un mundo que conocí gracias a la decisión de dejar mi empleo.

    Gracias por los consejos que nos das, porque veo que en verdad quieres ayudar. Un saludo!

    1. Hola María.
      Gracias por ser tan transparente 🙂
      Que bueno que tomaste la decisión de dejar ese trabajo. Siempre hay otros caminos que te pueden llevar a crear un vida en sintonía con tu valores y objetivos personales.

      De verdad que fuiste valiente al dejarlo. No cualquiera se atreve y te lo digo, porque lo he visto en muchos casos. Mucha gente valora más esa sensación de seguridad que la incertidumbre y la libertad de comenzar algo nuevo.

      Por lo que me cuentas, veo que ahora sabes, o estás en proceso de saber qué hacer en este momento de tu vida, eso es genial, ¡me alegro! 🙂

      Agradezco tus palabras, me llena de energía saber que te ayudan de algo los artículos.

      Un abrazo.