Recibe Gratis mi e-Book “A la Deriva – 5 razones por las que te sientes sin rumbo, sin saber qué hacer ni qué camino tomar en esta etapa de tu vida».

Compartir en:
No me gusta mi trabajo

No me gusta mi trabajo. Llevo bastantes años desempeñándolo pero nunca me ha gustado. Me he mantenido en él porque la paga es muy buena en comparación con lo que perciben la mayoría de los profesionistas en mi país. Sin embargo, ahora ya no me motiva el dinero. Trabajó sin ganas y sin la energía necesaria para continuar desempeñándolo de buena manera.

Quisiera reinventarme profesionalmente, ya sea para conseguir otro trabajo o emprender algún negocio que me motive a levantarme con entusiasmo todos los días, aunque eso implique sacrificar ingresos. Sin embargo, no tengo claro cómo llegar a lograrlo, además de tener la “presión” o el compromiso de tener que generar mes con mes el ingreso suficiente para cubrir los gastos para mantener mi casa y a mi familia.

Hace unas semanas un lector del blog, a quien llamaremos Luis, nos contó su experiencia en el trabajo y la manera cómo se siente en este momento. Si te sientes identificado de alguna forma con él, entonces te invito a leer un poco de la respuesta que le compartido con mucho gusto.

Desde ahora te adelanto que esa sensación de inconformidad, desilusión, desgana y/o aburrimiento que sientes en el trabajo, además de ser algo que te está afectando, también tiene una parte positiva. Lo que te está sucediendo, si lo manejas desde el enfoque adecuado, será tu puerta hacia un cambio positivo que transformará por completo tu manera de vivir.

Tal vez no lo has notado pero, un punto de inflexión está llegando a tu vida, y debes estar preparada(o) y tener el cinturón listo para cuando esto suceda.

Las dos maneras de ver la insatisfacción en el trabajo

Antes que nada quiero mencionar y aclarar que, en este artículo hablaremos específicamente para aquellas personas a las que no les gusta su trabajo. Es decir, podemos clasificar 3 situaciones de acuerdo a la percepción y sentimiento que experimenta una persona en su actividad laboral:

  1. Aquellos que aborrecen, o no disfrutan de los que hacen (como pude ser tu caso).
  2. Aquellos que no quieren trabajar y quisieran no tener que hacerlo nunca.
  3. Quienes tienen la fortuna de tener una actividad, negocio, profesión u oficio que los motiva, los inspira y los llena de verdad.

Aunque a simple vista parezca que la situación 1 y 2 son la misma, en realidad son muy diferentes si lo piensas con más detalle.

Si sientes la situación número 2, entonces te invito a leer el siguiente artículo que escribí hace algunas semanas:

[Artículo recomendado: No quiero trabajar ¿Qué puedo hacer?]

Ahora sí, aclarado esto, vamos a lo que nos concierne en este post…

¿Vives para trabajar o trabajas para vivir?

No debes sentirte mal si no te gusta tu trabajo. Aunque no lo parezca, es un problema muy habitual que se ha venido extendiendo mucho durante los últimos 100 años. Le sucede a una gran mayoría de personas en algún momento de su vida. No obstante, el hecho de que sea algo muy habitual, no significa que sea tu destino formar parte de las estadísticas, y conformarte con vivir la mayoría tus dias grises, de mal humor y en una queja constante.

No sé para ti, pero para mí la vida es una gran oportunidad que se nos ha otorgado entre millones de otras posibilidades. Teniendo esto en cuenta, no deberíamos desperdiciarla en un trabajo que nos consume; viviendo frutados, estresados y mal humorados. Y mucho menos en estos tiempos: los mejores de la humanidad hasta la fecha.

Estamos tan inmersos en nuestras “cosas importantes” de cada día, que olvidamos que «cada día» en sí, ya es un obsequio que se te pudo haber negado el día de hoy, sin previo aviso y sin tu consentimiento. A pesar de ello, muchas personas se levantan cada día sin ganas, frustrados e infelices por tener que a hacer algo que nos les inspira ni les motiva en absoluto para dar lo mejor de sí.

[Artículo recomendado: Hoy es el mejor día de tu vida ¿Qué harás al respecto?]

Sufren, se quejan, se aburren, se deprimen, pero vuelven a repetir lo mismo al otro día sin cuestionar sus acciones ni analizar ni identificar sus opciones. Pareciera que muy en el fondo albergan la esperanza de que las cosas puedan mejorar por si solas en algún momento. Sin embargo, las probabilidades de que eso suceda son mínimas.

“Necesito el dinero, no tengo de otra y es lo que toca…” – Tal vez te dices algo así para justificarte o excusarte cuando encuentras obstáculos y temes hacer un cambio. No obstante, este tipo de ideas, lo único que generan es impedirte encontrar soluciones y ver más allá de tus actuales circunstancias.

Y esque dime: ¿De qué sirve tener los suficientes ingresos para comprar cualquier cosa en la tienda o en el centro comercial, si para ello, tendremos que pasar la mayoría de nuestros gloriosos años de vida (únicos, finitos e irremplazables), encadenados a un empleo que odiamos y nos roba felicidad? Un empleo al que le estamos entregando el mejor de nuestros tesoros… el más valioso. Aquel que se nos fue otorgado solo por unas cuantas décadas y que, aunque preferíamos ignorarlo, sabemos que no durará para siempre.

 [Artículo recomendado: Te vas a morir, tu vida es ahora]

Un cambio de perspectiva en tu vida laboral

Para mí, el trabajo debe ser un vehículo de contribución, no solo de recepción y auto-beneficio. Si no te gusta lo que haces, entonces no te importa lo que aportas, y lo tanto, jamás podrás ni querrás hacer un trabajo del cual te sientas orgulloso y satisfecho.

Cuando no te gusta tu trabajo, haces lo minimo necesario para cumplir. No das un extra en lo que haces y tus actividades carecen de intensión positiva. No tienes una motivación verdadera, no hay pasión, ni un deseo genuino por dar un extra y hacer un buen trabajo.

Y sé que podrías preguntarme: Maurino, pero dime: “¿Por qué querríamos hacer un buen trabajo? ¿Acaso el objetivo último de todo esto no es simplemente ganar dinero para vivir y ya?…”

Creo que esta manera de ver el trabajo, es una de las razones por la cuales millones de personas se levantan cada día a hacer algo que en realidad no quieren. Pensando que no hay salida y que deben conformándose con vivir a medias. Una vida que no es, ni tan dolorosa, pero tampoco tan placentera ni satisfactoria como realmente podría ser.

¿Por qué buscar hacer un buen trabajo?

Todos debemos buscar hacer un buen trabajo por la simple razón de que en eso es lo que estamos consagrando nuestra vida.

Literalmente estregamos nuestras energías, juventud y tiempo, para realzar aquellas tareas. Queremos generar un resultado, y satisfacer a aquella persona, empresa o institución, que necesite de lo que tenemos para ofrecer. Ya sea entregar un producto o dar un buen servicio, estamos aportando un beneficio para ser recompensados en retribución por nuestro trabajo. Aqui la premisa básica es: Dar y Dar, en un ciclo positivo de abundancia, beneficio y recompensa para ambas partes.

Debemos buscar hacer un buen trabajo por el simple hecho de que es «nuestro trabajo», y por lo tanto, forma parte de nosotros. Será parte de nuestro legado y de la historia personal que estamos contrayendo cada día y a cada instante.

El trabajo es como una estela que dejamos a nuestro paso, que muestra la manera cómo utilizamos nuestro tiempo; lo que creamos y producimos para dar a los demás, no solo lo que recibimos.

No hacer nada, o hacer las cosas a medias y sin ganas, sería un desperdicio completo de nuestra vida.

Tus mejores años son ahora

Continuar por muchos años en un trabajo que no te gusta, a la larga te traerá terribles consecuencia de las cuales no habrá marcha a atrás. Un día mirarás al pasado y te darás cuenta que tus mejor años se han ido, desperdiciando tu capacidad, tus habilidades, virtudes y talentos, haciendo una actividad que ni siquiera te permitía disfrutar de tus dias.

En aquel momento podrías darte cuenta que gastaste tu mayor tesoro en algo que no te motivaba, no te importaba, ni sacaba lo mejor de  ti.

[Artículo recomendado: Tus mejores años son ahora ¿Qué estás haciendo con ellos?]

Para ese entonces será demasiado tarde para comenzar. Tu cuerpo ya no será el mismo, ni tendrás la misma energía y vitalidad que aún tienes en este momento.

Y esque no debes olvidar jamás que todo cambia con los años. Debes ser muy inteligente con la manera en como diriges tu vida y utilizas tu tiempo.

Así como en algún momento tomaste la opción de dedicarte a aquella profesión negocio u oficio, podrías ahora mismo comenzar por otro camino. Algo que si este alineado con lo que quieres y eres hoy en día.

Piensa que hay muchas actividades que puedes hacer ahora, que tal vez no podrás hacer en 10, 20, o 30 años. Si te digo que este tiempo es único y literalmente irrepetible e irremplazable, es porque realmente lo es.

Permanecer te costará más caro que lo que te pagan

Si vives quejándote, estresado, o de mal humor por estar en un trabajo que no quieres o no te gusta. Proyectarás emociones negativas muy a menudo y por tiempos muy prologados. Si esto te está ocurriendo, tal vez aún no notas problemas físicos, pero eso es algo de lo que realmente debes temer y tener sumo cuidado.

Las emociones negativas duraderas, a la larga tienen un efecto devastador en nuestra salud. Tarde o temprano esas quejas, corajes, angustias y/o tristezas se manifiestan a traves de enfermedades y de un deterioro acelerado de nuestro cuerpo.

Las emociones tienen un impacto muy grande en nuestra salud y en el funcionamiento de todo nuestro organismo. Es por eso que debemos cuidar muy bien nuestros pensamientos, emociones y sentimientos. Y si tenemos un trabajo, entonces debemos procurar estar bien durante nuestras actividades. Si no es así, entonces es tu deber procurar que así sea.

[Articulo recomendado: La salud: la mayor riqueza que puedes tener]

No me gusta mi trabajo pero gano bien

Muchas personas comenten el error de permanecer en su empleo solo por dinero. Incluso hay quienes, a pesar de explotados como esclavos modernos al recibir un salario muy bajo, no se atreven a hacer algo al respecto.

Si te pagan bien en tu empleo, puede parecer una buena decisión quedarte solo por el salario, No obstante, como ya hemos visto, cuando haces algo que no disfrutas, no te lleva a algún lugar deseado, no te llena, ni te inspira de ninguna forma, entonces sólo estarás desperdiciando tu vida.

Para ponerlo en perspectiva, veamos un ejemplo:

Piensa en algún “gusto” que te das comúnmente. Algo donde haces un gasto relativamente considerable. Puede ser por ejemplo: ir a un buen restaurante a cenar, ir de compras al centro comercial o ir al cine a ver una buena película que se está estrenando.

Darte ciertos gustos se siente bien y no tiene nada de malo. Después de todo, trabajas y te lo mereces ¿No es así? Con todo lo que sufres y te sacrificas cada día, es algo necesario, lo sé… Además, estás comprando productos o servicio de tu agrado y para tu beneficio ¿Verdad? Sin embargo, debes tener algo muy en cuenta…

El trabajo NO disfrutado NO vale la recompensa

A pesar de que te sientas bien al darte “un gusto” y hacer esa compra o ese gasto, debes tener presente no solo la manera en cómo te sientes cuando compras o gastas. También debes considerar muy detalladamente, la manera en cómo ganas el dinero. Debes recordar todo lo que tuviste que hacer para recibirlo y cómo te sentías en el momento de estar trabajando para obtenerlo.

Cuando colocas las cosas desde una perspectiva de intercambio de tu tiempo, juventud, energía y felicidad, a cambio de cualquier cosa que encuentras disponible en el centro comercial o en el supermercado, es cuando lo que compras toma un nuevo valor y significado.

Piensa que si haces un gasto o una compra con dinero que no disfrutaste trabajando y/o no tenia un objetivo claro, entonces en algún momento tendrás que volver a hacer lo mismo para volver conseguir esa cantidad. Y así el ciclo se repetirá de manera interminable hasta que un día te des cuenta que se han pasado varias décadas viviendo sin sentido ni propósito. Intercambiando tu tiempo por algún placer bien merecido en un buen fin de semana.

Si dejas pasar muchos años más, tal vez para ese entonces sea demasiado tarde para comenzar y difícilmente puedas tomar un nuevo camino.

¿Tu trabajo realmente te permite vivir bien?

Puedes decirte a ti mismo: “Mi trabajo no me gusta, pero me permite vivir bien.”, pero dime ¿Realmente es así?… Pongámoslo en perspectiva.

El día tiene 24 horas. Pasamos de 6 a 8 horas durmiendo y más de 8 horas trabajando, incluso hay quienes hacen jornadas de hasta 12 horas (incluyendo tiempos de transporte y preparación). Durante ese tiempo, ponemos nuestra atención y enfoque en nuestras actividades. Entregamos nuestra energía, tiempo, destreza y habilidad, para poder concretar nuestras tareas y conseguir los objetivos planteados.

Pasas casi todo el día en aquel lugar desde que sale el sol por la mañana hasta que cae por la tarde (y no importa si haces home office). Al salir del trabajo te quedan una cuantas horas disponibles, pero casi nunca suelen ser aprovechas.

Una parte del tiempo disponible será utilizado para prepararte para el siguiente día. Hay quienes pasan 2 horas o más en el tráfico diariamente y algunos tienen que llevar trabajo pendiente a casa al finalizar la jornada.

Entonces, dicho esto, ahora te pregunto: Si gran parte de tus dias y del tiempo que compone cada uno de ellos, es utilizado en un trabajo que no te gusta ¿Cómo decir que tu trabajo te permite vivir bien? ¿Acaso vivir bien es disfrutar solamente 2 dias de la semana? 

Toma en cuenta que 2 dias de 7, que tiene la semana, solo equivale es el 28.57% de nuestro tiempo de cada semana. Entonces, si me lo preguntas a mí, eso no es vivir bien. Y en tal caso creo que debemos ser más exactos y en vez de decir: “Mi trabajo me permite vivir bien” sería más correcto decir: “No me gusta mi trabajo pero me permite vivir UN POCO bien…

Ahora pensemos: ¿Qué es vivir bien? ¿Acaso vivir bien es tener dinero para comprar cualquier producto o servicio que se nos antoje durante el fin de semana? ¿Crees que en 30 años te acordarás de “la buena vida” que tuviste comprando todo lo que pudiste? Dime ¿Qué es lo que más valoras por encima de todo?

Creo que si vamos a gastar tanto tiempo de nuestra vida haciendo “algo”, entonces debe ser “algo” que de verdad valga nuestros días gastados y tenga sentido para cada uno de nosotros.

Si debemos quitarle nuestra atención y presencia a las personas que más nos importan para entregar ese tiempo en la ejecución de cierta actividad, entonces debemos procurar que dicha actividad cuente. Que cada día sea consagrado a algo que por lo menos tenga sentido, nos proporcione satisfacción y realización ahora y a largo plazo

El dinero de tu cartera ¿Es feliz o infeliz?

Debes saber que hay dos tipos de dinero: el dinero feliz y el infeliz.
El feliz es aquel que se gana con amor, pasión, vocación y entrega. El dinero infeliz es… bueno, creo que ya sabemos cuál es.

Este artículo es para todos aquellos que nos les gusta su trabajo. Si tú eres uno de ellos te quiero impulsar a hacer un cambio y a no conformarte. Tomar tu verdadero lugar en el mundo y ser quien quieres y necesitas ser.  

Posiblemente tienes miedo, sobre todo al pensar en todo lo que puede salir mal, pero aún con miedo debes hacerlo, porque es la única forma de ser feliz y crear una vida que te llene y te inspire de verdad.

[Artículo recomendado: Para ser feliz necesitas algo más que solo placer y comodidades]

Si no lo haces o ni siquiera lo intentas, esa “espinita” que se manifiesta como deseos por hacer algo diferente, va a perdurar por siempre. Será como una carga que llevarás a todas partes que jamás te dejará tranquila(o). Si no lo haces, un día mirarás atrás y podrías tener muchos arrepentimientos por no haber seguido tu intuición cuando aún era un buen momento.

[Artículo recomendado: Escucha a tu corazón y sigue tu intuición que no vas a equivocarte]

Una gran noticia ante la adversidad

Sin pretenderlo ya has dado un primer paso. Y esque si estás leyendo estas palabras ahora mismo, es porque has tomado consciencia de tu problema y estás buscando soluciones. Ya sea que estés pensando en emprender tu propio proyecto o encontrar un mejor empleo, profesión u oficio, ya estás dando un primer gran paso.

[Artículo recomendado: Antes de emprender un negocio, pregúntate esto]

La gran mayoría de personas que sufren de insatisfacción laboral, nunca se atreven a hacer nada al respecto. Saben que lo que hacen no les gusta, o incluso es un empleo que odian, pero carecen del valor, la visión, la iniciativa y la valentía para hacer algo diferente con su vida.

El pequeño acto de haber buscado una respuesta a tu situación actual, te coloca por encima del 90% de las personas que sufren este problema, y eso, querido amiga o amigo, ya es un gran avance.

Define tus verdaderos valores y no estarás tentado

Posiblemente llegues a escuchar a personas pesimistas que tratarán de detenerte y decirte que haces mal al dejar aquel trabajo. Incluso hay quienes se atreverán a decirte que debes estar agradecido por tener ese trabajo, pero dime, ¿Cómo agradecer por entregar tu vida a algo que te deprime, te hace sentir mal y no te permite disfrutar de tus días? ¿No crees que es bastante contra intuitivo y absurdo agradecer por algo así?

Es posible que incluso te ofrezcan un aumento de salario para que permanezcas y sigas laborando para ellos. Sin embargo, debes tener bien claro lo que quieres y valoras por encima de todo. De esta forma, sabrás hacia donde te diriges y no te sentirás tentado a tomar una oferta que solo aplazará lo inevitable.

[Artículo recomendado: Busca un aumento, pero NO de salario, sino de felicidad]

Entonces Maurino ¿Cómo empezar?

Despendiendo de tu situación actual, deberás hacer una u otra cosa. Es por eso que a continuación te comparto el siguiente post que trata el tema con más profundidad:

[Artículo recomendado: Cómo dejar el trabajo de la mejor forma y sin meterte en aprietos]

Si sientes en tu corazón que debes hacer algo diferente, entonces hazlo. Por qué es la única forma de ser fiel a ti mismo; a tus valores, deseos y convicciones personales.

El camino que te espera puede no estar repleto de rosas, pero te aseguro que te llenará de grandes experiencias y satisfacciones que ahora mismo ni siquiera puedes imaginar.

Más vale vivir intensamente haciendo algo que realmente tenga sentido (para ti), que dejar pasar tus mejores años viviendo a medias, pensando en que pudiste hacer algo mejor y diferente con tu vida, pero nunca te atreviste.

[Artículo recomendado: ¿No sabes qué hacer con tu vida? Aquí está el secreto]

◊♦◊

Ahora cuéntame ¿En qué situación te encuentras? ¿Qué es lo que no te gusta de tu trabajo?

Nos leemos en los comentarios. Y si te ha gustado, te invito a compartirlo con tus amigos o con alguien que lo necesite. Al hacerlo, me impulsas y me ayudas a seguir entregándote más contenidos como este y te estaré muy agradecido. ????

Compartir en:

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

7 comentarios

  1. Marino, tengo 48 años, aún me siento con energía para hacer prácticamente lo que sea, mi trabajo tiene una muy buena paga, pero no me satisface lo que hago, tal cual lo mencionas solo trabajo por el ingreso, yo disfruto mucho de trabajar con máquinas y herramientas y crear o convertir cosas en algo nuevo o diferente, vender logística paga las cuentas y da para algunos gustos pero el estrés y presión para conseguir resultados le quita todo lo satisfactorio que debe tener un trabajo y más aún si tus resultados dependen de un equipo de trabajo que no apoya.

  2. Hola, tengo 23 y en total llevo un mes trabajando en una empresa la cual me causa mucho estrés y ansiedad, tomé cuenta y pasó 15 horas del día fuera de casa por el trabajo (entre las 3 horas de transporte) me siento triste, lejos de mi familia y muy cansada, no me gusta ese trabajo, gano bien, pero entro cuando el sol está saliendo y salgo cuando la luna está muy brillante. No quiero pasar toda mi vida encerrada en un lugar como ese, he visto que muchos abogados han pasado por ahí y se van. Pero le cuento a mi familia y piensan que soy débil y hasta me siento tonta, pero no dejo de llorar por las tardes, porque es feo.

    1. Hola Eva, personalmente creo que 15 horas diarias dedicadas a un trabajo por cuenta ajena son demasiadas. Prácticamente el tiempo que te queda es para dormir. No tienes tiempo para ti y no es sano pasar tus días de esa manera. No es el algo sostenible en el tiempo. Por eso piensa que, en tu caso en particular, deberías plantearte dejar ese trabajo y buscar uno que te ofrezca mejores condiciones. No quiere decirlo, pero pienso que te están «explotando».

      Con «mejores condiciones» me refiero, a definir aquello que te importa y valoras por encima de todo y el tipo de trabajo que quieres y te gustaría tener. No hay manera de que encuentres un trabajo que te guste o te inspire, si no sabes cómo debe ser o qué características tiene.

      La mayoría de personas cuando terminan sus estudios, no saben qué quieren ni que esperar de su profesión u oficio. No tienen un objetivo claro y normalmente buscan cualquier «oportunidad» que se les presente. Cuando la encuentran, la aceptan sin pensarlo.

      ¿Has notado que colocado entre comillas la palabra «oportunidad»? Eso es porque las oportunidades no son para todos. Todo depende de hacia dónde vas y qué quieres conseguir.

      Define qué quieres hacer con tu vida en esta etapa y actúa a partir de ello. No permitas que tu futuro sea definido por la carrera que estudiaste el primer trabajo que encontraste. No tienes que resignarte a pasar tus días de esa manera ¡No tiene sentido!

      Tienes el poder y la capacidad elegir la dirección que deseas para tu vida. No obstante, lo importante aquí es saber: Cuál es esa dirección. [Artículo recomendado: No hay camino correcto ni definido. Elige crear tu vida]

      Tu familia te dará los consejos que considera adecuados de acuerdo a sus creencias personales, a su cultura y su estado de conciencia actual. Sin embargo, eso no quiere decir que sean acertados o que realmente funcionen.

      Piensa que, si te «duele» la idea de pasar todo el día dentro de aquel lugar, es porque:

      • No está alineado con un propósito de vida.
      • No te importa ni te interesa.
      • No está en armonía con tus valores vitales.

      Por eso no tiene sentido ir por ahí.

      Tal vez no te puedas permitir dejar el trabajo mañana mismo, pero crea un plan dónde establezcas la fecha y tengas claro que harás a partir de ese momento.

      Cómo puedes darte cuenta, todo parte de lo que tú quieres, necesitas y debes hacer en este momento de tu vida. Enfócate en eso y trata de no pensar demasiado en lo que no quieres, ya que puede nublarte el juicio y las ideas.

  3. Hola, he leído este artículo unas 4 veces ya, y siento como si hablara de mí. Me identifico tanto con lo que dice y es justo como me siento desde hace ya un buen tiempo. Es difícil llegar a mis 37 años y seguir esperando que algo suceda para que todo cambie, se que debo ser yo quien inicie el cambio, pero el miedo es un gran influyente que me ha impedido hacer lo que me gusta o lanzarme a hacer algo nuevo, la falsa seguridad de tener algo estable, espero tener el valor de un día decir hasta aquí y comenzar lo que realmente me apasione.

    Saludos!

    1. Hola Ana.
      Algo muy bueno es que ahora eres consciente de lo que te ocurre. Sin embargo, recuerda que tomar acción lo es todo.

      A veces somos conscientes de algo pero no hacemos nada al respecto, aún sabiendo lo que necesitamos.

      [Artículo recomendado: Ser más consciente no cambiará tu vida]

      El miedo lo puedes aminorar de varias maneras pero al final va a permanecer, en mayor o menor medida, pero ahí va a estar. Es por eso que te animo a afrontar tus miedos y comenzar ya, sin esperar que llegue el momento idóneo.

      [Artículo recomendado: Cómo gestionar tus miedos en 5 pasos]

      Piensa que el primer paso, a pesar de ser sencillo, suele ser el más difícil de dar, pero entre más lo postergues es posible que las dudas comiencen a atormentarte y te paralicen aún más.

      Por eso, simplemente piensa cuál es el primer paso; el más simple y el más lógico, y cuando lo tengas establece una fecha inamovible (por escrito), comprométete de verdad y hazlo. ¡Tu futuro depende de ello!

      ¡Un abrazo!

  4. Yo hace tiempo tuve ese problema. Y actualmente en mi trabajo, hay temporadas bajas que es un aburrimiento.
    Pero, me plantee buscar trabajo de otra cosa y no lo encontré.
    Además mi experiencia me limitaba mucho al sector de trabajo en el que me he dedicado. Y decidí conscientemente, seguir. Pero, haciendo que me guste. Es decir, me volqué, formándome más, leyendo sobre el tema y mejorando mis habilidades… Por ejemplo, no me gustaba nada atender público. Sufría mucha ansiedad y siempre que podía me escaqueaba. Lo vi como un reto. Y me puse a trabajar en mi autoestima. De fondo había un miedo a ser juzgada por el otro, así que trabaje en ella y me expuse más al público. Aplique fórmulas de asertividad y empecé a hacer curso de atención al público y telefónica, y demás. Me sigue no gustando, pero he obtenido reconocimiento del público. Me Dan las gracias por la información recibida, porque me esmero en hacerlo bien. Y algunos días, he sentido felicidad por hacerlo bien y por haber ayudado al otro.
    Así que yo aconsejaría hacerlo y hacerlo como si te gustará mucho.
    Tb, después me busque una actividad extra. Una de esas actividades que me gustaba cuando era niña… Como es coser… Y agradezco poder ganar dinero para ir a corte y confección, simplemente porque me gusta. No lo planteo como una segunda profesión de momento, pero si es un hobby que no podría hacer si no tuviera este trabajo.
    Así que, yo pienso que la frustración es positiva porque te hace apreciar el entusiasmo cuando lo hay, pero es una decisión…. Yo lo veo así… Decides que te guste… Si ves lo positivo…

    1. Hola Ros

      Gracias por compartir tu experiencia. Seguro que será muy valioso para muchos de los lectores saber cómo abordaste tu situación.

      Personalmente admiro la manera en cómo te moviste y te adaptaste para generar un cambio. Tanto a nivel interno como en tu forma de trabajo.

      Y aunque mencionas que aún no te gusta del todo lo que haces, es algo de lo que has conseguido sentir orgullo y recibir reconocimiento.

      Como se dice comúnmente: «Le diste la vuelta a la tortilla» y encaraste tu situación con una nueva perspectiva.

      Es precisamente el orgullo y sla sensación de contribución, uno de los ingredientes clave que “sostienen” a muchas personas en su actividad laboral, y veo (con gusto) que eso es lo que te ha sucedido.

      Se tiene la creencia general de que lo que hacemos primeramente debe ser algo que nos guste o nos apasione, pero como lo he mencionado antes, no es algo que aplique a todas las personas.

      Si sientes que la satisfacción o la recompensa que te produce hacer tu trabajo, es algo que te puede sostener a mediano largo plazo, con motivación y ganas de hacerlo bien, entonces pienso que no tienes que alarmarte momentaneamente.

      No obstante, si llegas a sentir en algún momento que por más que te esfuerces no consigues ese toque de positivismo que ahora tienes, creo que será momento de buscar alternativas.

      Y no hablo precisamente de buscar un nuevo empleo en otro lugar. Tal vez puedas ver la posibilidad de tomar y probar otro cargo en el mismo lugar donde ahora te desenvuelves.

      Puedes sonar complicado, pero a veces solo es cuestión de tocar a la puerta.

      Te animo a que no descartes por completo tu gusto por coser. Son oficios que se estan perdiendo y cada vez más serán más demandado. Si de verdad es algo que te apasiona, podrías ver la la manera de generar un fuente de ingresos secundaria o alternativa. ¿No crees? 🙂

      Espero te encuentres muy bien.

      ¡Un abrazo!