Existe una frase popular que dice: “Nunca es tarde para empezar“. Posiblemente ya la hayas escuchado, incluso hay varios personajes famosos que la citan con alguna variante.
Es un dicho comúnmente utilizado para impulsar a las personas que creen que es demasiado tarde para comenzar aquello que siempre quisieron, pero por alguna razón nunca lo intentaron. Dejaron pasar los años y tiempo después quieren retomar ese camino.
Suena bastante bien ¿No crees? poder hacer aquello que nunca nos atrevimos y hacerlo en cualquier etapa de nuestra vida.
Bueno, desafortunadamente esa frase no es correcta 🙁
Si ya leíste el ebook “7 razones para cambiar tu vida”, entonces ya sabes a que me refiero. Ahora vamos a completar la idea.
Contenido
No es pesimismo, son las reglas del juego
No, no intento ser pesimista y quitarle las ilusiones a las personas que dejaron pasar sus años haciendo cualquier cosa. Esa no es mi intención, ojala se pudiera, no existirían los arrepentimientos y tendríamos siempre la oportunidad de enmendar nuestras faltas y errores. Pero no es así… perdón, quiero decir, no siempre es así.
Las reglas de juego de la vida están definidas y no podemos evitarlas (por ahora).
Un pequeño ajuste
No es verdad que nunca es demasiado tarde para empezar, ya que a veces si es demasiado tarde. Observa que digo a veces porque hay cosas que si podemos hacer en cualquier momento de la vida.
Una frase mejorada podría tener la siguiente forma:
“A veces no es demasiado tarde para empezar.”
Si, se que puedes decirme: bueno Maurino, ¿ese cambio en que puede afectar?
Es cierto, es un pequeño cambio, pero la frase original puede hacer mucho daño a quien la sigue y la cree ciegamente.
Aquellos que aún tienen la oportunidad (para quienes aún no es tarde), podrían creer que la afirmación original es cierta y dejar pasar sus años haciendo cualquier cosa. Y darse cuenta tiempo después que la oportunidad se ha ido para siempre.
No todas las frases por muy famosas que sean son verdaderas o absolutas.
Las dos reglas base
Hay dos reglas o leyes que hacen que la frase original no sea correcta. Para mí son las más importantes. Nunca debemos perderlas de vista si queremos vivir siempre al máximo. Estas son:
Con un tiempo limitado para andar por el mundo, no debes pensar que nunca será demasiado tarde para empezar. En algún momento no habrá más tiempo para cada uno de nosotros.
Además, durante ese tiempo no podrás hacer lo mismo, porque no serás siempre el mismo. No puedes hacer todo lo que puedes hacer con 20 años de edad que con 70.
A pesar de lo lógico que puede sonar, la realidad en que no somos conscientes de lo que esto realmente implica. Muchos vivimos como si nuestra vida nunca fuese a terminar. Postergamos y no aprovechamos las capacidades que ahora tenemos. A veces ni siquiera somos conscientes de nuestras posibilidades hasta que ya es demasiado tarde.
Entre más temprano mejor
Alguna vez escuche a alguien decir: “No te apresures, todo tiene su momento“. Si embargo, si no te das cuenta y ese momento pasa, la oportunidad no regresa jamás.
Entre más temprano en tu vida descubras tus posibilidades, podrás elegir adecuadamente lo que quieres hacer en cada etapa.
La juventud trae consigo infinitas posibilidades pero a medida que envejecemos comienza una pérdida progresiva.
Cuestiona tus creencias
Puedes pensar que estás haciendo con tu vida lo que quieres o debes hacer y creer que no hay otra cosa que te gustaría más en este momento, pero por favor no descartes la idea y mejor realiza una introspección.
Para ver todas tus posibilidades debes poner a prueba todas tus creencias y descubrir si hay algo que te está limitado. Sera como quitarte un lente que nubla tu vista y ver todo lo que es posible para ti.
Al envejecer vas perdiendo
Muchos quieren llegar a una buena vejez, pero no todos se preparan para ello. No sabemos bien todo lo que implica llegar a la vejez y te aseguro que es más complicado de lo que parece.
No solo tienes que cuidar tu salud y tu dinero para el retiro, también debes prepararte mentalmente para la perdida.
Poco a poco perderás vitalidad, elasticidad, energía, memoria, fuerza, calcio en los huesos, belleza física… Perderás mucho y no lo podrás evitar.
Por si esto fuera poco, en algún momento perderás el mundo que alguna vez conociste.
Así es, las pérdidas no solo ocurrirán en tu cuerpo. Comenzaremos a perder amigos, padres, hermanos, muchos integrantes de la familia partirán, algunos antes y otros después.
Cuando lleguemos a cierta edad comenzaremos a perder mucho y será complicado soportar y adaptarte tanta pérdida. Debes tener una resiliencia muy grande para cambios de tal magnitud.
Creo que esa es la razón por la que muchas personas al llegar a cierta edad dejan de tener entusiasmo. En muy poco tiempo su mundo cambia como jamás había hecho. Conocen gente nueva; niños y jóvenes con ganas de comerse el mundo. Las formas de vivir cambian y aquellas persona que conociste y con las que creciste en tus tiempo de juventud comienzan a partir.
Envejecer involucra también prepararnos mentalmente para esos grandes y duros cambios inherentes a la vida.
Vivir es un regalo
A pesar de que así es la vida, no debemos olvidar que vivir es un maravilloso obsequio.
Si esas son reglas del juego entonces hay que aprende a vivir con ellas.
Quise mostrarte el escenario de la vejez para hacerte la invitación a reflexionar. Piensa si hay cosas que posiblemente te gustaría hacer ahora pero no te atreves. Tal vez tienes un miedo que te paraliza, o simplemente estás cómodo(a) con tu situación actual. Pero como ya viste, la comodidad que estás viviendo ahora no va a durar. Tarde o temprano las cosas van a cambiar y cambiaras en el proceso.
La vida puede ser corta para NO hacer todo lo que quieres o muy larga para hacer lo mismo una y otra vez por 30, 40 o 50 años.
Estar aquí es un regalo y una oportunidad. Tienes que tomar decisiones e influir en el cambio mediante acciones. No te dejes llevar por la corriente.
Aún no es tarde para empezar
Afortunadamente aún no llegas a ese momento de gran pérdida, es por eso que ahora te pregunto ¿Qué vas a hacer a partir de ahora con la energía y vitalidad que tienes? Ten presente que no va a durar para siempre.
No te contengas de vivir lo que quieres vivir. Si deseas algo, si realmente quieres algo entonces ve y hazlo. Nadie sabe cómo debemos vivir y nadie te puede decir cómo hacerlo. Esa tu misión, o más bien, es parte de este juego que lo descubras.
¿Qué puedo hacer hoy?
Pregúntate ¿Que puedes hacer hoy que mañana no podrás?
Esta pregunta te puede ayudar a cumplir unos objetivos que tal vez no te has propuesto, que incluso no conoces y que son posibles para ti en esta etapa de tu vida.
Deja la cosas que puedes hacer después y haz aquellas que no podrás hacer más adelante.
Ahora mismo tienes una gran potencial que aún no has explotado. Ese potencial no durará por siempre, así que aprovéchalo.
Como ya lo hemos visto, el gran orquestador del cambio es el tiempo, el cual está oxidando nuestro cuerpo con cada bocanada de oxígeno que llevamos a nuestros pulmones. Nuestro cuerpo se recupera, pero cada año pierde parte de esa capacidad de recuperación.
NO tienes todo el tiempo del mundo y un día si será demasiado tarde para empezar. Así que, cuestiónate de forma específica:
¿Qué es lo mejor que puedo hacer ahora, a esta edad, con estas energías, en este único e irrepetible momento?
Cuando tengas tu respuesta, traza un plan y comienza a moverte.
Y por favor recuerda lo siguiente:
Para cambiar tu vida no necesitas hacer nada. De cualquier forma cambiará, pero para asegúrate de que el cambio sea bueno, controlado y libre de arrepentimientos debes moverte a consciencia en todo momento.
◊♦◊
Ahora cuéntame:
¿Alguna vez te han dicho que nunca es tarde para empezar?
¿Que opinas al respecto?
Nos leemos en los comentarios y si te ha gustado te invito a que lo compartas con tus amigos. Si lo haces me ayudas a crear más contenido como este y te estaré muy agradecido 🙂